26 marzo 2013

PACO HUESCA Y LA "DOLCE VITA" DE LOS AÑOS 60 EN LA PLAYA DE SAN JUAN


Actores españoles de talla internacional tenían residencia 
en una urbanización de la playa de San Juan.

Más de 200 películas se rodaron en Alicante y sin tener estudios de cine.

Sofía Loren puede que se alojara en  “La Zenia“, invitada por  Jorge Mistral.


Cuando paseamos por los alrededores de La Zenia,  urbanización de los años 50, apenas podemos vislumbrarla. Porque aunque está situada a  cien  metros de la playa, sólo  si miramos hacia el cielo el cambio de vegetación nos da la pista para ubicarla. Unos altísimos pinos nos indican su situación y también el paso del tiempo y de una época. Rodeada por otras construcciones más modernas ha conseguido permanecer como en una isla, una isla de tranquilidad y de recuerdos.

Nada más advertirla nos adentramos casi en un mundo aparte, tranquilo y  sosegado  entre sus casas con grandes jardines, muchas de ellas permanecen   casi intactas a través del tiempo.



Allí, en estos chalets de vallado bajo y  grandes piscinas, vivió  Jorge Mistral, uno de los actores más prestigiosos de talla internacional. Nacido en Valencia, en la localidad de Aldaia, como su madre  y de padre portorriqueño fue el galán del momento. Por su éxito era aclamado en toda España, Europa y traspasando el continente,  en Cuba, Puerto Rico, Bolivia y muchos más, hasta Méjico, país a dónde trasladó su residencia dos años antes de morir.

Jorge Mistral estuvo desde mediados de los 50 hasta 1970 viviendo en la Playa de San Juan, nombrada así en la prensa internacional cuando se referían a su residencia habitual, aunque  la denominación concreta es  Playa Muchavista.  Pero no era la única estrella que vivía allí.

 
 Jorge Mistral
Mistral además tenía como vecinos a Carmen Sevilla, Luis Mariano, Celia Gámez, Rocio Durcal, Mercedes Vecino, Alberto Closas; así como al productor de cine Luis Sanz Santiago, descubridor de Lola Flores y fuera de la urbanización, aunque muy cerca se instalaron  el director y productor de cine Luis César Amadori y su mujer, la actriz argentina Zully Moreno.

Luis César Amadori dirigió a Mercedes Vecino en “Dónde Vas Alfonso XII”,   a Analía Gadé y Alberto Closas en  “Una Muchachita de Valladolid”  y  a  Sara Montiel, a la que encumbró con “La Violetera”.

Ante la fascinación por todo este vecindario de la gran pantalla  se me ocurre llamar a alguien que debe conocer bastante  bien “la doce vita” de aquellos años tan  increíbles  para la mayoría  de los alicantinos.

Por eso se me ocurre compartir estos momentos con una persona enamorada de todo lo que tiene que ver con el cine.

Paco Huesca, cinéfilo, ex propietario de los cines Astoria en Alicante, que  durante mucho tiempo nos permitieron  ver películas menos comerciales y sobretodo gran conocedor del cine y que el año pasado nos regaló una magnífica exposición sobre cine que sorprendió al público por la gran cantidad de material  y de detalles que mostraba.

Paco, ¿qué te parece que en la actualidad todas estas historias de cine de Alicante no se conozcan?

Pués es una pena  que no se recuerde aquella época porque Alicante tiene más de 100 películas rodadas en Alicante ciudad y  otras tantas en la provincia durante los años 60;  con estrellas de talla internacional y sin estudios de cine;  lo cual fue muy meritorio. Allí en el  puerto de Alicante había dos barcos, donde  se rodaron infinidad de películas. Por eso  Alicante tiene historia para celebrar un festival de cine, con más motivo que otras ciudades que los tienen, sin haber tenido la  gran cantidad de rodajes que se han hecho aquí.

 ¿Recuérdanos qué otros directores rodaron en nuestra tierra?

Desde mediados de los 50 hasta pasados los 60 las coproducciones entre España, Francia  e Italia eran habituales. Aquí rodaron directores de la talla de Rafael Gil, Luis Lucia, Peter Ustinov, Luis Escobar, Guy Hamilton, Vicente Escrivá,  Pedro Lazaga, Jesús Franco, José María Forqué, Juan Antonia Bardem, Luis Sáenz de Heredia y Burt Kennedy, que con “El Retorno de los Siete Magníficos (1966), rodada también  en Alicante y fue una película nominada a  Oscar.



Volviendo a “La Zenia”, ¿Por qué sería que eligieron esta  zona para vivir?


La zona es perfecta y muy tranquila y al instalarse aquí el director Luis Cesar Amadori y traer a trabajar a muchos actores buscaron una zona en la que pasaban desapercibidos; ya que entonces el turismo no era tanto como ahora.

Paco, Mercedes Vecino  tenía un chalet aquí, justo detrás del de Jorge Mistral .

Sí, además  Mercedes Vecino ha vivido aquí hasta que falleció en septiembre del 2004 en el Hospital de San Juan. Esta gran actriz vivió aquí en el anonimato durante muchos años. Ella interpretó a Isabel II en  “Dónde vas  Alfonso XII” dirigida por Luis Cesar Amadori, película con la que conquistó al mundo.


¿Crees que Alicante debería hacer un esfuerzo por recuperar la historia de nuestro cine?

Por supuesto, deberíamos disfrutar de nuestra historia, Mercedes Vecino además de guapísima, era una gran actriz y sus películas recorrieron el mundo.

Te voy a poner otro ejemplo: Ahora mismo estoy volcado en que se le dedique una calle e  Alicante a la gran cantaora, Antoñita Moreno, esta sevillana conocida como “La Niña de la Puebla”. La llaman así porque era una niña  de 12 años de edad, cuando comenzó a deslumbrar al público con su voz. Y vive  aquí en Alicante desde hace muchísimos  años.

Era una niña y competía con Pastora Imperio, Imperio Argentina, Mª Fe de Triana y como ellas, también recorrió el mundo sorprendiendo con su voz.

Conocí a una persona que trabajó aquí, en casa de Jorge Mistral y me contó  que  Sofía Loren estuvo alojada aquí en “La Zenia” invitada por el actor ¿Hay algo publicado al respecto?

Que yo sepa  no hay nada publicado. Pero no me parece imposible que vieniera ; porque cuando Sofía Loren vino en 1961 a Peñíscola (Castellón) a rodar “El Cid” con Charlton Heston; ya se conocían. Habían rodado juntos la película “La Sirena y el Delfín”,  rodada en Grecia. Así que no me extrañaría nada que Sofía,  aceptara venir desde Peñíscola hasta la Playa San Juan para pasar unos días con sus amigos.

El año pasado la ciudad de Alicante ofreció una exposición con todo el material de cine recogido por ti a lo largo de toda tu vida. Por la gran acogida que tuvo, ¿cuándo seria posible volver a verla? Y ¿Crees que sería conveniente que todo este material tan valioso se  exhibiera  de una forma permanente?

No sé cuando el Ayuntamiento podría exponerla de nuevo, porque esto ya depende de esta entidad, ya que el fondo de la misma se le cedió. En cuanto a lo segundo, sería un sueño que esta exposición fuese permanente para ayudar a reforzar la cultura del cine y la historia de nuestro cine alicantino.

Con este paseo por las calles de “La Zenia” que algunos años atrás recorrian los actores mientras pensaban en sus películas y en sus contratos cinematográficos,  nos imaginamos a Sofía Loren entrando a casa de Jorge Mistral para disfrutar de unos días descanso, a Lola Flores y al “Pescailla” o su prole, alojados en casa de Mercedes Vecino, a María Asquerino,  desaparecida hace tres semanas  y a tantas actrices y actores traspasando las puertas de estas casas con tanta naturalidad como aparentaban en la gran pantalla. Quizás olvidando en esos días que eran auténticos mitos del cine mundial.

Muchísimas  gracias Paco Huesca por este paseo por el cine  y espero que hasta muy pronto.

SILVIA PÉREZ 
CAMALLONGA

Desde Alicante Vivo queremos dar las gracias 
a Paco Huesca y a Silvia Pérez por esta colaboración, 
epserando que sea la primera de muchas más.

19 marzo 2013

LOS OLMOS DE GABRIEL MIRÓ, EN PELIGRO


ACTUALIZADO A 3 DE JUNIO DE 2013

Juan Javier Maestre Gil, Jefe de Área de la Concejalía de Atención Urbana del Ayuntamiento de Alicante nos remite un escrito en contestación a nuestra consulta y petición sobre el mantenimiento de los olmos de Gabriel Miró, adjuntando un informe del Ingeniero Agrónomo Municipal, Carlos Domínguez Herrera, en el que se asegura que no se va a talar ningún olmo histórico y que se realizará un estudio para tomar las decisiones adecuadas para preservar la vida y seguridad de estos ejemplares.

Nos felicitamos ante esta decisión, y queremos compartirla con todos nuestros seguidores. Del mismo modo, agradecemos a la Concejalía su contestación oficial y su decisión de preservarlos.





A CONTINUACIÓN, EL ARTÍCULO ORIGINAL


La silueta recortada de un olmo centenario, frente a otro patrimonio histórico de nuestra ciudad: el edificio de Correos. Fotografía de José Cremades.
La plaza de Gabriel Miró en Alicante es uno de los últimos jardines románticos que sobreviven prácticamente inalterados desde su creación, formando parte del conjunto de Paseíto de Ramiro (totalmente transformado), Portal de Elche y Panteón de Quijano.

Plaza de Gabriel Miró en 1918, ya se aprecian los olmos al fondo, junto a las pérgolas.
Los olmos de Gabriel Miró, en la década de 1960.
A lo largo de su historia, su fuente de la Aguadora y sus frondosos árboles han refrescado esta zona de la ciudad en un reducto de paz y tranquilidad en pleno centro urbano.
Durante las últimas décadas, sufrió un proceso de deterioro y abandono en las edificaciones que la rodean, que conllevó una irremediable degradación de la zona, con una lenta y tardía respuesta por parte de la administración.

Un ejemplar de los árboles que le han molestado al Ayuntamiento y que desea eliminar. Fotografía de José Cremades.
Fantástica escena urbana, absolutamente única en Alicante, donde el arbolado de este tipo  apenas existe. Parte del éxito del resurgir de la Plaza de Gabriel Miró se debe, sin duda, a su fantástico arbolado. Eliminarlo para renovar la plaza supera lo absurdo. Fotografía de José Cremades.
Hoy en día, la plaza luce como ya casi no se recordaba. Abren comercios, cafeterías y restaurantes a su alrededor. El Colegio de Arquitectos apostó por trasladarse a una nueva sede en la plaza, recuperando un emblemático edificio histórico, y recientemente, Correos ha recuperado su fantástico edificio.



Primavera, verano, otoño e invierno en la Plaza de Gabriel Miró, con el ciclo anual de los olmos. Fotografías de José Cremades.
En todo este proceso, alguien ha debido pensar que le estorba parte del arbolado, y el ayuntamiento ha fijado su mirada en los magníficos ejemplares de olmos centenarios que acompañan a los ficus de la plaza. Estos árboles, tan infrecuentes en nuestra ciudad, y propios de tiempos pasados, no sólo aportan una calidad ambiental propia de localidades más interiores y de ciudades de otras latitudes con sus hermosos troncos y su hoja caduca, sino que sus copas han adquirido un porte de gran magnitud, y ofrecen una sombra espectacular en los meses de verano, que tanto se necesita.

La escultura de la Aguadora rodeada de un marco incomparable gracias a las frondosas copas de los olmos. Fotografías de José Cremades.
Prueba de la belleza de estos árboles es el registro fotográfico que podéis encontrar en el blog Time Flies, donde periódicamente José Cremades realiza un reportaje a la evolución de colores y frondosidad de los árboles de la plaza.
Plaza de Correos, 2013. Fotografía de José Cremades.
Este patrimonio natural y vivo de los alicantinos es más que un elemento ornamental o paisajístico, pues los olmos se han convertido en un símbolo del espacio público, y por tanto son un bien cultural y social.

Fotografías de la parte superior de los troncos vaciada para evitar que acumulen agua. Se aprecia cómo el árbol sigue vivo y en perfecto estado de salud. El hueco está cicatrizado y las ramas siguen brotando cada primavera. Fotos de José Cremades.

Hueco preventivo practicado en la base de un olmo de la plaza de Gabriel Miró.
El proyecto (que conocemos sólo por la prensa) planea eliminar estos ejemplares para sustituirlos por otros jóvenes, que tardarán décadas en alcanzar un porte similar (si es que no los vuelven a talar), y desde Alicante Vivo hemos contactado con varios profesionales (Ingenieros Forestales, Agrícolas y Agrónomos) para que nos den su opinión técnica respecto a si estos árboles pueden ser salvados, y todos coinciden en que estos árboles no presentan ningún riesgo de caída, y en caso de que en el futuro hubiera algún riesgo, existen suficientes técnicas y ayudas para mantenerlos en su lugar sin riesgo.

Estos árboles se encuentran ahora mismo huecos en su base precisamente porque su madera absorbe la lluvia, y con la edad, empiezan a convertirse en grandes "depósitos" naturales de agua, lo que puede provocar que se pudra su tronco y entonces sí que exista riesgo de caída.
Es por ello que de modo preventivo, se vaciaron en su base hace años, para salvarlos y garantizar su supervivencia en el futuro, de modo que el tronco desaloja el agua que acumula cada vez que llueve, y vuelve a secarse.
Esta operación se realizó por profesionales, sin poner en riesgo la estabilidad de los árboles, y prueba de ello es el magnífico estado en que se encuentran.
Sin embargo, es el argumento que esgrime el Ayuntamiento para justificar el coste de las obras que va a realizar en la plaza, que pueden ser muy necesarias de cara a su mejora, pero que no deberían incluir la eliminación de un tesoro natural como son estos olmos:
“Ademas, de acuerdo al proyecto, se eliminará algún olmo “que entendemos es muy peligroso por riesgo de caída al estar huecos“, que se replantarán “para perpetuar la imagen de la plaza”.

Ni la Grafiosis, famosa enfermedad de los olmos, que acabó con tantos ejemplares monumentales en la Montaña de Alicante, pudo acabar con ellos, pues nunca llegó a esta ciudad y permitió que hoy podamos disfrutar todavía de los ejemplares que quedan en plazas como Gabriel Miró o el Panteón de Quijano. Sin embargo, un nuevo atentado programado a nuestro patrimonio parece ser que sí terminará con su historia.

Nuestra compañera Anna Dèlia Taes, Ingeniera Agrónoma, nos ha aportado unas soluciones convencionales para asegurar partes en peligro en árboles, totalmente eficaces y seguras, que supondrían la salvación de estos árboles (si es que se encuentran en riesgo):



Del mismo modo, en el blog de Time Flies, de José Cremades, podemos ver una selección de apoyos y refuerzos a árboles que ya se aplican en la ciudad de Alicante (la mayoría en el propio entorno de la plaza):




El mismo Colegio de Ingenieros Técnicos Agrícolas de la Provincia de Alicante nos ha remitido esta nota en la que aportan su visión profesional acerca de esta situación:


En este escrito, se asegura que "no se encuentra oportuna la eliminación de ningún olmo", puesto que desde el punto de vista estructural son totalmente estables, y que su aspecto es el propio de ejemplares de su edad.
Proponen su estabilización, y la realización de informes más exhaustivos que no estén basados sólo en inspecciones oculares, sino también en un informe fisiológico de los mismos.
Del mismo modo, se cita al recientemente publicado (e insuficiente) Catálogo de Árboles Monumentales de Interés Local (CAMIL) aprobado el 30 de enero de 2013 (descargar aquí [PDF, 0.4 mb]) del Ayuntamiento de Alicante, en el que se incluyen estos olmos y se les dota de medidas protectoras para preservar su estado y prolongar su vida el mayor tiempo posible. 
De hecho, en el Capítulo II, se cita claramente que "la descatalogación se producirá por la muerte o desaparición del ejemplar". Es decir, es el propio Ayuntamiento de Alicante el que está incumpliendo su normativa y destruyendo el patrimonio arbóreo que ellos mismos han catalogado.
Si de esto sirven los catálogos de protección y así se escucha a los profesionales y a los ciudadanos, ¿qué nos queda esperar?




En el catálogo, se describen con la siguiente reseña en la ficha dedicada a la arboleda de la plaza: "Junto a ellos (los ficus) existen 5 olmos viejos, que si bien no llegan a alcanzar la categoría de árbol monumental a que se refiere la ley (de Patrimonio Arbóreo Monumental), destacan por alcanzar portes muy superiores a los habituales de la especie. En conjunto (ficus y olmos) forman una arboleda de importante valor recreativo, ambiental y también cultural, puesto que su antigüedad (alrededor de 120 años) lo hacen ya parte integrante de la ciudad. Por ese motivo, todos son merecedores de medidas de protección y conservación específicas".

Cada uno de los cinco olmos posee en dicho catálogo una ficha específica con datos como su altura (entre 9 y 14 metros), perímetro de tronco (entre 250 y 365 cm), diámetro de copa (entre 8 y 15 metros) o edad estimada (100 años). También se hace constar en las cinco fichas como amenaza la enfermedad de la grafiosis, que ha arrasado buena parte de la población de esta especie de árbol en España en las últimas décadas, destacando la ausencia de esta enfermedad en parte de la provincia de Alicante, incluyendo a la ciudad de Alicante, por lo que cobra aún mayor interés su estricta protección y conservación en la ciudad.

Desde la Asociación Cultural Alicante Vivo vamos a presentar una petición por escrito a la concejalía de Atención Urbana del Ayuntamiento de Alicante para atender al informe técnico del COITAPA, instando a conservar en todo caso los ejemplares de los olmos centenarios, realizando un examen exhaustivo técnico de su estado, y procediendo a estabilizarlos si se considera necesario, con tal de preservar la identidad y el ambiente de este jardín histórico y el tesoro natural de este conjunto de árboles.
En caso de que no recibamos una rápida respuesta, iniciaremos una campaña ciudadana de recogida de firmas y de actos reivindicativos en la plaza, para la que contamos con todos vosotros.






La plaza de Correos en verano, todo un paraíso de copas frondosas, sombra y fresco protegiendo al paseante del excesivo calor. Fotografías de José Cremades.
Esperamos que nuestra petición sea atendida, y que no recurran a sus conocidas estrategias de destrucción del patrimonio, pues cualquier día la plaza puede amanecer con el sonido de las motosierras que nos han robado a los olmos para siempre.

Esta fotografía puede ser una premonición de lo que va a suceder si no lo evitamos: en primer plano, un árbol joven , dispuesto para ser plantado. De fondo, uno de los olmos centenarios. Fotografía de José Cremades.
Nuestro más sincero agradecimiento a Anna Dèlia Taes, José Cremades, Hugo Riquelme Ortega y al COITAPA por su colaboración para realizar este escrito y luchar por conservar estos magníficos olmos. 

17 marzo 2013

TOPONIMIA TABARQUINA


La toponimia, también conocida como onomástica geográfica, es una disciplina de la onomástica que consiste en el estudio etimológico de los nombres propios de un lugar. Según la Real Academia Española (RAE), el término «toponimia» deriva etimológicamente del griego τόπος (tópos, «lugar») y ὄνομα (ónoma, «nombre»), y tiene dos acepciones:

1. Estudio del origen y significación de los nombres propios de lugar.
2. Conjunto de los nombres propios de lugar de un país o de una región.

Por otra parte, la talasonimia es la parte de la toponimia que se refiere a los nombres con que se designan los mares u océanos, así como los accidentes costeros. Y, del mismo modo, la antroponimia u onomástica antropológica, sería la rama de la onomástica que estudia el origen y significado de los nombres propios de las personas, incluyendo los apellidos.

El contenido de este artículo está basado, fundamentalmente, en los apéndices del trabajo realizado por Cosme Aguiló i Adrover y Joan Miralles i Monserrat, con motivo del XIV Col·loqui d’Alacant, celebrado por la Societat d’Onomàstica en 1989, y publicado con el título La toponímia de l’Illa de Tabarca. Está complementado y revisado con otras fuentes, en especial el magnífico plano de Felio Lozano Quijada, Vadum Maris Nova Tabarca Insulae, publicado anexo al n.º 60 de la Revista Canelobre del Instituto Alicantino de Cultura «Juan Gil-Albert».

Cosme Aguiló i Adrover, filólogo mallorquín, es doctor en Filología Catalana, destacado especialista en toponimia, dialectología y etimología; miembro del Institut d’Estudis Catalans, y colaborador del Departamento de Filología Catalana y Lingüística General de la Universitat de les Illes Balears. Joan Miralles i Monserrat, filólogo y folklorista también mallorquín, es igualmente doctor en Filología Catalana, y catedrático de la Universitat de les Illes Balears, siendo director de su Departamento de Filología Catalana y Lingüística General; es miembro de la Sección Filológica del Institut d’Estudis Catalans.

Fragmento del Atlas de Gerardus Mercator, 1632

Sirva para ilustrar este interesante trabajo que, para la redacción de su extensa introducción histórica, los autores se basaron en la conocida obra y tesis doctoral de José Luis González Arpide, publicada en 1981 por el entonces denominado Instituto de Estudios Alicantinos, bajo el título Los tabarquinos. Estudio etnológico de una comunidad en vías de desaparición, así como en la tesis de licenciatura de 1975, en la fecha del estudio todavía inédita, de Ana María Ramos Vara, con título Orígenes del pueblo tabarquino, gestiones para su abastecimiento en la isla de San Pablo (Alicante 1770) y vida del mismo en la Nueva Tabarca, completado con notas de la Gran Enciclopèdia Catalana (1978). Y que fue estructurada en cuatro partes: L’Illa de Tabarca (Santa Pola), L’altra Illa de Tabarca (Tunísia), Emigració de tabarquins a l’Illa de S. Pietro, y De nou a Tabarca (Santa Pola).

Por otra parte, cabe destacar que, para llevar a cabo la investigación, los autores se sirvieron fundamentalmente de informaciones orales, proporcionadas por las siguientes diez personas: Rafael Arques Chacopino, «El Païto» (1942), José Antonio López Baile, «Jose» (1957), José López López (1944), Tomás Parodi Ruso (1909), Pascual Ramírez Parodi (1931), Roque Ruso Chacopino (1922), Anto­nio Ruso Garzón, «Antoniet» (1935), José Ruso Mulet (1919), Estanislao Ruso Que­sada (1906), y Francisca Salieto Ruso (1905).


Un breve apunte de antroponimia tabarquina

Lo verdaderamente interesante del estudio está contenido en sus apéndices. Para empezar, confeccionemos una lista de los apellidos de tabarquinos procedentes de territorio italiano o corso, que aparecen en diversos listados de los siglos XVIII y XIX, tal como constan en las citadas obra de referencia, aun sin cotejarlos con los manuscritos originales, lo que nos lleva a que esta lista pueda contener algún error de transcripción. Pero valga como muestra útil, para comprender así el alcance y consecuencias de la inmigración genovesa en esta antroponimia tabarquina.

Matrícula de los tabarquinos, 1769.
Archivo Municipal de Alicante (AMA)

Pues bien, alfabéticamente, y partiendo de la acepción más general, entre paréntesis se incluyen las formas en femenino y las variantes gráficas:

Acheno (Achena), Arti.
Bacala, Barabín, Basalo, Belando (Belanda, Belenda), Beroti, Biso, Brusi, Bruzo (Bruso), Brusoni, Bruzono, Burguera (Burgero), Buzo (Buza, Buso, Busa).
Capriata, Capriona, Caprista, Carrosino (Carozino, Carosino), Casteli, Cereceto (Zerezeto), Cereto, Cantagalo (Contagalo), Compiano, Crestadoro, Colomba (Columba, Columbo, Colombo).
Chena, Chinchones, Chipolino (Chipolina).
Daniele (Damiele), Due.
Fabiani, Ferrand, Ferrandi, Ferraro (Ferrara).
Gandulfo, Ganucho, Graso, Groso, Gerra (Gierra, Guiera, Guerra).
Jacopino (Chacopino, Chacupino).
Lahora, Leoni, Luchoro (Luchora).
Manzanero (Manzanaro), Marcenaro (Marzenaro, Marzanaro, Mercenaro, Macenaro), Mendrice (Mendrise), Milelire, Moinare, Molino, Morino, Montecatini.
Noli (Noly, Nolis).
Olivero (Olivera, Oliveros), Opiso, Oregio.
Parodi, Pelerano (Pelerana), Perfumo (Perfuma), Pianelo, Pitaluga, Pomata.
Repeto, Rivano, Ribera (Rivera), Riverola, Reynaldi, Rochena, Rochero, Romba, Rumba, Ruso (Rusa).
Sales, Saly (Sally), Sarti, Sele, Sevasco (Sevasca).
Taverso, Timón, Timoni, Tubino.
Utrera.
Vila.



Talasonimia tabarquina: litoral, islotes y escollos

L’Algamassa / La Roca de l’Algamassa. Situada al SO del islote de La Cantera. La argamasa es una mezcla de cal y grava, usada en la construcción. Pudiera ser que de aquí se hubiera extraído algún tipo de material para fabricarla.
L’Amerador / Els Ameradors. Al S de la punta más cercana a La Cantera. En la isla se fabricaba cuerdas de esparto. No sería extraño que este lugar fuera uno de los puntos donde se ponían a remojo («amerar» en valenciano significa empapar).
Baix del Cementeri. Al final de la Platja Gran, en la parte S de la isla.
Baix de Ca Ferrandis / Baix de la Bòvida. Ambas denominaciones provienen de los nombres de dos edificios del pueblo, situados en las proximidades de este lugar. Está al N, al pie de las murallas.
Baix del Forn. Probablemente hace referencia a un horno de cal. Se sabe que hubo uno en las proximidades de La Platja, en la parte S.
Baix de les Paleres. Toma el nombre de la zona de El Camp donde abundan las chumberas, hacia la parte S de la isla.
Baix del Piló. En la costa del N. Debe el nombre a un hito, mojón o pilón, situado en la parte alta de la costa.
Baix del Pouet. El pozo en cuestión está situado a la parte alta de las murallas.
El Banquet. Ahí se pescaba. También era un punto donde la gente se bañaba.
El Bol de l’Espet. En la parte N de la isla, cerca del Cementerio. «Bol» es una parte de un arte de pesca con red, y «espet» en valenciano es el pez denominado espetón, o usualmente barracuda.
El Cagalló. En la parte del S, junto a la Roca Foradada. Es un pequeño escollo alto y cilíndrico.
El Cagalló del Serrallo / El Cagalló. Al N, al principio de la población.
Cala Menaca. Más que una verdadera cala, es una sinuosidad de la costa S. Es un topónimo poco claro, tal vez un arabismo. Un mapa de 1766 registra la denominación Cala de Menacha. Después de los temporales, los tabarquinos iban allí a recoger esponjas.
Cala Rata. Tampoco se trata de una entrada del mar. Está también en la costa S, delante del islote de La Galera. No se ha registrado que en este punto abundaran las ratas de un modo especial que justificara esa denominación. Un mapa de 1766 sitúa la Cala de las Ratas en la actual Platja de la Faroleta. 
La Calanca de Garbí / La Calanca de Fora / La Calanca de la Nau. Al SE del islote de La Nau. Es uno de sus puntos de acceso. «Calanca» es sinónimo de «caleta».
La Calanca de Llevant / La Calanca de la Nau / La Calanca. Paradójicamente está al N de La Nau.
La Caleta. Dentro del actual puerto. Aquí varaban antaño los laúdes («llaüts»).
El Camí dels Moros / El Blanc de la Nau. Está entre La Naueta y La Nau. Es una franja de rocas a menos de tres metros de profundidad. Se dice que los moros quisieron hacer un camino para unir los dos islotes. La realidad es que los estratos de este lugar están levantados hasta la vertical, dando un aspecto de camino en el fondo del mar.
El Canal. Es el nombre de un pequeño escollo, medio partido, de la parte N de la isla, a la altura del Cementerio.
La Cantera. Islote situado en la parte O de Nueva Tabarca. Lugar del que se extrajo, en el siglo XVIII, la piedra para construir las murallas de la población. En algunos puntos se llegó a rebajar a ras de agua. Está separado de Tabarca por un pequeño estrecho que, en ocasiones, se puede franquear sin necesidad de mojarse los pies. Este estrecho muestra la huella de una intensa actividad extractiva, lo que hace sospechar que, antes de la construcción del pueblo, no era una isla, sino una península. Así se observa en el mapa de Fernando Méndez de 1766. La Cantera era el lugar donde se iban a bañar las mujeres.
El Canyó del Moll. Delante del Portal del Moll está este cañón de hierro, encastrado en la roca, que debía servir de noray, ya que este era el primer lugar que sirvió de puerto, según testimonios.
Cap Falcó / Punta Falcó. Constituye el extremo oriental de Tabarca. Un pequeño estrecho le separa del islote de La Naueta. Los vocablos «cap» i «punta» normalmente no llevan artículo. Algunos informadores dudan de la situación de este topónimo. Aparece Cabo Falcón en mapas de 1766 y 1807.
Cap Llobarros / Cap de Barros. Es una punta al S del pueblo. El nombre puede venirle del pez conocido como lubina o róbalo, popularmente «llobarro».
El Cap de Moro. En esta ocasión, «cap» no significa cabo, sino cabeza. Pequeño escollo de la parte S, a modo de una especie de cabeza negruzca que sale del agua. Consta como Peña del Moro en el mapa de 1766.
Cap de Rata. Situado al S de la isla, frente a La Galera. Hay quien dice que esta punta tiene la forma de una rata.

Fragmento del Vadum Maris Nova Tabarca Insulae, de Felio Lozano Quijada.
En él podemos encontrar los talasónimos: en la costa N, El Piló, La mina, La Xanca,
El Moll, La Cova, La Caleta, El Serrallo, La Poera, El Port Vell
y La Roca del Moll;
hacia el O, Gomes, El Passet, La Cantera, La Roca del Camell, La Punta del Bol,
La Roca del Forat, El Cagalló, La Roca del Bol, La Roca dels Garrets
y Cap de Moro;
y en la costa S, La Cova de les Armes, La Cala dels Birros, La Cala del Francés,
La Roca Pobra, La Cova del llop Marí, La Platja, La Cala Menaca
y La Seca de Felipe.

Caparrós. Es un escollo que apenas sobresale del agua, entre La Naueta y La Nau, pero más cerca de la primera. Caparrós es un apellido, no sería extraño que fuera el de alguien que hubiera chocado en él con su embarcación. Existen numerosos ejemplos en la toponimia, de escollos cuya denominación es un apellido, y cuyo significado podría ser éste.
La Cova dels Birros / La Cova. En una calita del S de la población. Por las descripciones de los informadores, que dicen que el «birro» es un pájaro pequeño, negro y bullicioso, de alas curvadas, al parecer se trataría del vencejo común.
La Cova dels Coloms. Está sobre el islote de La Galera, en la parte de levante.
La Cova de les Llagostes / La Coveta de les Llagostes. Dentro de El Port, cerca de La Caleta. Antigua­mente los tabarquinos tenían allí los viveros de langostas.
La Cova del Llop Marí / La Cova dels Llops Marins. En un rincón de la parte S de la población. El «llop marí» o lobo marino es, en realidad, la foca monje o foca mediterránea. En Nueva Tabarca se dice que siempre hubo una pareja. Parece ser que el último ejemplar desapareció víctima, como siempre, de la persecución humana, a finales de la década de los años veinte a los treinta del siglo XX.
La Cova de la Nau / La Cova del Contrabando. Situada en la parte alta del islote de La Nau, y hay constancia de que, en ocasiones, se escondió tabaco de contrabando en ella.
La Cova del Sucre / La Cova. Actualmente coincide con una playita en el interior de El Port, y se desconoce la ubicación exacta, ya que cuando se construyó el muelle actual, quedó destruido en parte aquel sector. No se conoce la razón de tal denominación.
La Coveta del Cementeri. No es más que una pequeña oquedad en la parte N de la isla, a la altura de la necrópolis. Cuentan que hace mucho tiempo vivía allí una persona.
Darrere el Port. Pequeño rincón a levante de El Moll.
L’Escull Foradat. Es un escollo perforado, frente a la punta del mismo nombre, en la costa del N de la isla.
L’Escull Negre. Al S de la isla, muy cerca de La Galera. El adjetivo responde a la coloración de la roca.
L’Escull Roig. A levante de La Galera, delante de Les Pedres Roges. La coloración es ferruginosa.
L’Estufador. Al SE del islote de La Nau. Es lo que también se conoce como un «bufador», una cavidad con un conducto por el que corre una corriente de aire, conforme baten las olas en ella, sonando como un soplido.
El Faralló Pla. Está cerca del centro de la aglomeración de escollos conocida como Els Farallons.
El Faralló del Tio Campiste / El Faralló Campiste. No se conoce la localización exacta. Unos dicen que dentro del conjunto de Els Farallons, otros lo sitúan fuera de La Llosa. Presumiblemente, este Tio Campiste debió ser alguien que chocó allí con su embarcación. No hace sino reforzar lo dicho para Caparrós.
Els Farallons. Es un cúmulo de escollos y rocas planas, apenas cubiertas por el agua («tenasses»), extendido hacia levante en el extremo oriental del archipiélago. Al estar a flor de agua, constituyen un grave peligro para la navegación.
El Freuet / El Freu. Es un paso, practicable por embarcaciones menores, que separa los islotes de La Naueta y La Nau.
La Galera. Es un islote situado al S de Tabarca. Parece que antiguamente ahí vivía una colonia de conejos. Su denominación se entiende abarcando todo el conjunto de puntas y escollos bajos, que recuerdan la silueta de un navío. Documentada en mapas de 1766 y 1888.
Gomes. Es un escollo casi unido a la población, en la zona que da a Les Bòvedes. Debe llevar el nombre de alguna persona de apellido Gómez. Con ello se entra en reiteración de lo ya comentado de otros escollos que llevan nombres personales.
La Llosa. Bajofondo situado a alrededor de media milla de distancia de la Punta dels Farallons. Está a una profundidad de 18 palmos, y está señalizada con una boya por la parte de fuera.
La Lloseta. Bajofondo a unos 200 metros de la Punta dels Farallons, en dirección a La Llosa.
El Mal Pas. Está situado en Els Farallons, próximo a La Nau. Parece que no se trata de un paso para embarcaciones, sino terrestre. Vendría a significar que, el que camina sobre los escollos, al llegar a este lugar encontraría ciertas dificultades para pasar.
Les Maries / Les Dos Maries / Les Tres Maries. Se trata de unas rocas, sumergidas unos dos metros, situadas entre La Naueta y La Nau, más cerca de esta última. A pesar de la segunda denominación, los informadores suelen coincidir en que son tres piedras. Podría tratarse de una metáfora, queriéndolas comparar con las estrellas del Cinturón de Orión, pero no sabemos si estas estrellas son conocidas con el mismo nombre en Tabarca, como para justificar este topónimo.
La Merdosa. Es un escollo prominente, prácticamente unido a La Nau por la parte de levante. El nombre se explica por la acumulación de defecaciones de aves marinas.
La Merdoseta. Escollo similar a La Merdosa, pero al S de La Naueta. Su denominación obedece a la misma explicación.

En este segundo fragmento de la obra de Felio Lozano, quedan reseñados los
talasónimos: en el N, Les Pedres Reones, Romptimons y L'Escull Forat; al S,
Cala Rata, El Sortior, La Galereta, La Galera, L'Escull Negre, La Platja de la Faroleta,
La Roca Reona, La Sabata, L'Escull Roig, Les Pedres Roges
y La Platja Gran;
y hacia el E, La Perla, La Tanda, La Naueta, La Merdoseta, El Freu y El Saltaor.

La Mina. Oquedad, hoy cegada, de la parte N de la isla, en las inmediaciones de El Port. El poeta Salvador Rueda, que tuvo durante años su residencia en la isla, al parecer tenía ahí su embarcación. Por la costa N se observan vetas ferruginosas que forman parte del subsuelo. El nombre debe recordar algún intento de su explotación.
El Moll / El Moll Vell / El Moll Antiu / El Port Vell / El Moll Nou. Al N de la población, al lado de La Pouera. Es el lugar que se utilizaba para llegar a la isla antes de la construcción del puerto actual. Para unos es «vell» porque es anterior al actual. Para otros es «nou» porque recuerdan otro todavía más antiguo.
El Moll Vell. Al N de la isla, delante del Portal del Moll. Una pequeña entrada del mar, de la que se dice que fue el primer puerto de la isla.
El Mollet de l’Americà. Pequeño desembarcadero cerca de El Serrallo. Dicen que fue construido por un americano.
La Nau. Islote alto, situado entre Els Farallons y La Naueta. Vista de lejos, recuerda la silueta de un barco. Ya citada con ese nombre a finales del siglo XV.
La Naueta. Islote muy parecido a La Nau, entre éste y la isla de Tabarca, de la que le separa un pequeño paso. Desde Tabarca se puede llegar a él casi sin mojarse los pies. Es también bastante alto y recuerda igualmente un barco navegando.
El Passet. El pequeño brazo de mar que separa Tabarca del islote de La Cantera. No es practicable por ningún tipo de embarcación, pero sí a pie. Probablemente, y debido a la intensa actividad de extracción de piedra que tuvo lugar en esa ubicación, este pequeño paso sea artificial, y quedó como hoy lo conocemos en el siglo XVIII, a consecuencia de la construcción de las murallas.
Les Pedres Roges. Aglomeración de escollos al S de la isla, entre ésta y L’Escull Roig.
La Peladilla. A flor de agua, en la costa N, no muy lejos de L’Escull Foradat.
La Perla. Bajofondo al NE de La Naueta. Se dice que «sale cuando están las aguas secas», es decir, cuando están bajas y en calma. Se desconoce el motivo de esta denominación, que pudiera estar inspirada en alguna metáfora. Documentada en 1766.
La Platja. El gran arenal inmediato a la población, al S de El Port.
La Platja de la Faroleta / Baix de la Faroleta / Baix de la Farola / Baix del Faro. En la costa S, frente a La Galera. En la parte alta está La Balsa de la Faroleta. El nombre debe provenir del faro de la isla.
La Platja Gran. Situada al SE, es la playa más larga de la isla.
El Port. Es el punto por donde actualmente se puede acceder a la isla. No fue sino hasta el año 1944, cansados de pasar peripecias, cuando los habitantes de Nueva Tabarca vieron realizado su sueño de tener un lugar medianamente seguro para anclar sus embarcaciones.
El Portet de l’Americà. Al N, junto a El Serrallo. Al parecer, construido por un americano.
La Pouera. Es una pequeña playa de la zona N, al lado mismo de la población. La denominación puede tener su origen en el Pou del Pal, pozo situado en la parte alta de la muralla, en sus inmediaciones.
La Punta de Baix del Forn. Es la punta que cierra La Platja.
La Punta del Bol. Está en el extremo de poniente de La Cantera. Ya aparece con este nombre en la carto­grafía de 1766.
La Punta de Cala Menaca. Al S, junto a la cala de dicho nombre.
Punta Cap Falcó. Este nombre, que se ha situado en un extremo de La Galera, no es seguro del todo. Sí que lo es, en cambio, la identificación de Cap Falcó con el extremo oriental de Tabarca. Pudiera ser, sin embargo, que esta denominación tenga su origen en el hecho de que, dicha punta de La Galera, esté mirando hacia el Cap Falcó.
La Punta de l’Escull Foradat. Al N, a la altura de La Casa del Camp.
La Punta dels Farallons. Constituye la primera tierra emergida del archipiélago, por su parte oriental.
La Punta del Femer. Está justo detrás del muelle actual. Se dice que ahí tiraban el estiércol («fem») cuando limpiaban los establos de La Casa del Camp.
La Punta del Moll. Junto a La Pouera, al N del núcleo urbano.
La Punta del Piló. En la costa N, junto a La Mina. El nombre le viene de un mojón situado en las inmediaciones.
La Purissimeta. Dentro de una hornacina excavada en la roca, hay una imagen de la Virgen. Según cuentan, la colocó ahí un fraile hace un cuarto de siglo.

Tercer fragmento del Vadum Maris Nova Tabarca Insulae, en su parte más oriental,
en el que podemos observar: La Nau, L'Estufaor, La Merdosa, Els Farallons y La Llosa.

La Roca de la Cantera. Es un escollo al SE de La Cantera.
La Roca de l’Emperador. Es un bajofondo, entre La Galera y L’Escull Roig, a tres metros de profun­didad. Puede tratarse de una referencia al pez espada o emperador.
La Roca Foradada / La Roca del Forat. Al S, cerca de El Cagalló. Horadada, como su nombre indica.
La Roca del Mero. Frente a Cala Menaca. Es obvia la referencia al pez denominado garopa, más conocido como mero.
La Roca de la Mina. Una roca alta al lado de El Port.
La Roca Pobra. Es un escollo cercano a La Cova del Llop Marí. Según los marineros, su denominación proviene de que se coge poca pesca en sus alrededores.
La Roca Redona. Un pequeño escollo al NE de La Galera.
La Roca del Serrallo. Al lado de El Port, junto a El Serrallo.
La Roca de la Tanda. Pequeño escollo al final de La Platja Gran, muy cerca de La Naueta. No hay una explicación satisfactoria del origen de esta denominación, si bien parece probable la acepción en referencia a un período de tiempo, de esta palabra.
Romptimons. Sugestiva denominación que designa un bajofondo al NE del Cementerio. Está a una profundidad tal que permite pasar a la embarcación, rompiendo, sin embargo, la pala del timón.
La Sabata. Escollo en forma de zapato («sabata»), entre Cap de Rata y La Roca Redona.
El Saltador. Es el lugar por el que se puede acceder a la parte alta de La Nau por su cara SO.
El Sec de la Punta del Bol / El Sec de la Cantera. Es un amplio bajofondo al NO de La Cantera.
La Seca. Pequeño escollo cercano a la Punta del Piló. La denominación no es demasiado segura, dadas las discrepancias entre los informadores.
La Seca de l’Escull Negre. Se encuentra a una distancia de unos veinte metros del escollo, y a una profundidad de tres.
La Seca de la Nau. En los alrededores de La Nau, sumergida a unos ocho palmos. El emplazamiento no está exactamente definido.
La Seca del Piló. En la costa N, cercana a La Mina.
La Seca de la Punta dels Farallons. Es el primer escollo que sale del agua por la parte de levante.
El Serrallo. Rincón en un lateral de El Port. Por el hecho de ser un lugar abrigado dentro del puerto, cabe pensar que se trate de un italianismo a partir de «serràglio», que viene a significar lugar cerrado. Si lo fuera, sería un pequeño testimonio superviviente de la lengua de los colonizadores del siglo XVIII.
El Tamboret. Es una punta al SE de La Cantera. El topónimo invita a pensar que el traslado de la piedra que se extraía de La Cantera, se hacía por mar, ya que se denomina «tambor» al cilindro de madera del cabrestante donde se enrolla la cuerda, y que se utilizaría para alzar las piedras con la finalidad de embarcarlas. En ese caso, en la citada punta estaría instalada en su tiempo dicha máquina.
El Trajo del Tio Bertomeu / La Platja del Tio Bertomeu. Al N del islote de La Cantera. Al parecer, ahí varaban laúdes («llaüts»), y «trajo» o «trájol» es el nombre que se le da al espacio de la playa reservado para cada barca, dispuesto de manera que, por un plano inclinado, se pueden lanzar al agua o traer a tierra.
La Vària del Tio Bertomeu. Al lado del topónimo anterior. Una «vària» o «vaira» es una mancha arenosa dentro de un algar.
La Xanca. Junto al actual muelle. Aquí estaba antiguamente el edificio de La Almadraba, hoy ocupado por el Museo Nueva Tabarca, que albergaba una industria de salazón, especialmente de melva y bonito. Se denominaba «posar en xanca» a la acción y efecto de colocar el pescado en salmuera para conservarlo.
La Xapa / La Xapada del Bol. Al S de La Cantera. Muy probablemente se trata de una derivación de la palabra «sapa», una mata de algas vivas que crece en el mar.

Mapa de las zonas de la Reserva Marina de Nueva Tabarca, en el que se
hacen constar algunos de los talasónimos de referencia para las mismas.

Otros talasónimos tabarquinos

La Barbada de l’Almadrava. La barbada es un pez de la familia del bacalao, más conocido en esta zona como «maruca». Posee una aleta dorsal rectilínea que le cubre casi todo el lomo. Probablemente el topónimo viene dado por la similitud con esta aleta, de una extensa serie lineal de rocas que afloran en el fondo del mar, aproximadamente a la altura de donde se calaba la almadraba, alrededor de un kilómetro al S de La Galera.
La Barbada de la Punta del Bol. Otra cresta rectilínea de rocas submarinas, en este caso a cierta distancia frente a La Punta del Bol.
La Barbada del Reclau. En la zona así denominada, al SO de La Nau.
La Barreta. Amplia y escalonada franja arenosa situada frente a La Platja Gran, densamente cubierta por pradera de posidonia.
El Clot. Zona situada al S de La Nau, a unos quince minutos a motor, con una profundidad de cerca de veinte brazas (una braza española equivale a 1,852 metros, una milésima parte de una milla náutica).
Els Fanals. Es un conjunto de rocas submarinas de localización imprecisa al S de Tabarca y, por esa misma razón, de toponimia injustificada.
Els Garbells. Algueros situados alrededor de El Clot. Un «garbell» es un alguero con poca fijación al lecho marino, que por ello se puede arrancar o desprender con facilidad.
Montnegre a les Forques. Es una sierra de rocas, localizable si desde la isla se pone proa a Alicante. Hay unas siete u ocho brazas de profundidad, y en ella se pescaba abundante atún. Su denominación probablemente responda tanto al color de las rocas como a formaciones ahorquilladas que puedan dibujarse en su morfología en el fondo marino.
El Reclau. Un «reclau» es una faja de piedra diferente, por su consistencia y color, del resto de rocas que forma una pedrera. Está al SO («a garbí») de La Nau, a cerca de veinte brazas de profundidad.
La Serra del Cap. Es una amplia y prominente zona arenosa, según se dice situada de forma imprecisa mirando desde La Nau hacia Alicante.



Toponimia urbana de Nueva Tabarca

En 1913, están documentadas las siguientes calles de Nueva Tabarca: A. Marco, Barón de Petrés, Bóvedas, Calaboset, Plaza de la Caleta, Carmen, Desierto del Sáhara, Gobernador, Muelle, Retiro, San Pedro, Serrallo y Tabarca.

Las calles de la isla reciben su nombre definitivo en 1965, coincidiendo con la publicación de un apéndice a la Guía de la Ciudad publicada cinco años antes. Según escribe Fernando Gil Sánchez en el Diario Información, se rotularon las vías públicas: Arzola, Bergantín, Camarada Maciá, Carlos III, Corsario, Escuela, Gaviota, Génova, Generalísimo, Iglesia, José Antonio, Muelle, Poeta Salvador Rueda, Pósito, Soledad y Virgen del Carmen.

En 1979 cambian de nombre: la calle del Camarada Maciá por carrer del Motxó, la calle de José Antonio por carrer d’Enmig, y la plaza del Generalísimo por plaça Gran.


Aguiló y Miralles, en su trabajo toponímico de 1989, definen todo lo siguiente, precisando el contenido de cada vía en dicha fecha, por lo que puede no coincidir con denominaciones o situaciones actuales.

El Poble
Calles, plazas y casas. Ocupa la pequeña península amurallada de la parte occidental de Tabarca o, dicho de otro modo, todo el espacio no ocupado por El Camp.

El Carreonet. Nombre popular, cuya denominación oficial desde antiguo era Callejón del Muelle, según los informantes.

Carrer del Bergantí. Denominación oficial, no popular.

El Carrer del Carmen / El Carrer de la Mare de Déu del Carmen. Nombre oficial: Carrer de la Verge del Carme. En él se sitúan, o lo estaban:
- Ca Úrsula.
- Ca Juana. En la fecha del estudio era un bar.
- Ca l’Arnat.
- Ca Manola. Antes Ca Roig de la Fillola.
- Ca Tio Maestro. Era maestro de escuela y pescador.
- Les Calderes del Tio Gallegues. Era un lugar en el que se teñían las redes.
- Cal Tio Victoriano de Mestret. Era también maestro de escuela.
- Ca la Coixa / Cal Tio Xan.
- Ca Cristino. Era un hombre que falleció ahogado.
- Cal Pistolero. Había un bar.
- Ca Tio Pepe Forces.
- Ca la Tia Rafaileta / La Casa de Tia Rafaileta.
- Ca Tio Capelo. No se trataba de un apellido, por lo que probablemente fuera una pequeña muestra de supervivencia lingüística italiana.
- La Casa de la Muda.
- La Casa de la Duenda. En Tabarca es cuentan muchas historias referentes a apariciones de seres sobrenaturales. Probablemente este topónimo haga referencia a uno de estos casos.
- Ca Tia Issabel.
- Ca Jaume de la Cardona.
- El Forn del Tio Burrero.
- Ca Ana.
- Ca Tia Taneta.
- Ca Vissitassion.
- La Casa del Polero. En referencia a un nativo de Santa Pola.
- Cal Tio Roig del Piu.
- La Casa de la Tia Matilde.
- La Casa de Colau el Llarg.
- La Casa del Tio Cranc.
- La Casa del Moreno.
- La Casa del Tio Carlos.
- Ca Tia Pepica. Había una carnicería.
- La Casa de Ferrandis.
- La Casa de Gerardo.
- La Casa d’Amadeo.
- La Casa del Aspero. Era de un nativo de Aspe.
- La Casa de la Reina. La propietaria era conocida con este mote.
- Cal Tio Mineta.
- Ca Tia Conxa.
- La Casa de Maria la Xata.
- El Calabós. Se dice que hubo un horno.
- Ca Vicent de Xólo.

Carrer de l’Escola. Nombre oficial, no recogido popularmente.

Carrer d’els Gavines (sic). Nombre igualmente oficial, no recogido por tradición oral.

Carrer de Gènova. También oficial, no recogido vía oral.
- La Casa de Juanjo.

El Carrer de la Església.
- Ca la Xata / La Casa de la Xata.
- Ca la Bartola.
- Ca Doloretes de Ganàncies.
- Cal Xiquet de Mercé.
- Ca Rafael el Xan.
- Ca Tio Mercé.
- Ca la Tia Xon. «Xon» es un apelativo familiar (hipocorístico) de Concepción.
- Ca Tio Juanet.
- Ca la Pessiganya. La «pessiganya», en castellano la pizpirigaña, es un juego infantil en el que los participantes colocan las manos con los dedos extendidos y las palmas hacia abajo, y un niño o un adulto pellizcaba suavemente en los dedos mientras iba cantando una canción. Había una tienda de comestibles.


El Carrer Major / El Carrer del Mig. Nombre oficial: Carrer d’en Mig.
- La Casa del Portal / La Casa de Tio Juan del Portal. Está situada junto al Portal de la Caleta.
- Ca Tio Blai.
- La Casa de Sento el Gangallo. «Sento» es Vicente.
- La Casa de Salvadorico / Cal Birro.
- La Casa de Pura. «Pura» equivale a Purificación.
- La Casa de la Xata la Cardenala.
- Ca Tio Uenso.
- Ca Tio Tomàs el Viudo / Ca Tio Viudo.
- Cal Tio Bartolo de l’Estanc.
- Ca Tia Esperança del Tio Caín.
- Cal Tio Bancalets.
- Ca Sola. «Sola» es hipocorístico de Soledad.
- Ca Tomàs el Viudo.
- La Casa de Don Alvaro. Era un médico.
- Ca María de l’Estanc. Había una tienda de comestibles. A la propietaria le llamaban La Maria de l’Estanc.
- La Habana. Era un restaurante.
- El Taller del Tio Enrique. Era una carpintería.
- La Casa del Rojo. «Rojo» con el significado de rubio.
- La Casa de Colau. «Colau» es Nicolás («Nicolau»).
- La Casa d’Eugenio / La Magazent d’Eugenio.
- La Casa de Pasqual.
- Ca Tia Conxon. «Conxon», hipocorístico de Concepción.
- La Casa de la Pelilla. «Pelilla» es hipocorístico de Josefa.
- La Casa del Tio Pepe Galeta. La «galeta» es una pieza redonda aplanada que va colocada en el extremo superior del palo de una barca.
- La Casa d’Obdúlia.
- La Casa de la Francesa.
- La Casa del Forner. Del panadero.
- Cal Tio Gerreta. Se le llama popularmente «gerreta» al naipe as de copas.
- Ca Tio Carlos.
- El Cassino.
- Ca Paquita.
- La Casa del Tio Peixet.
- Ca Tio Tunico Mele. «Mele» es una población italiana muy cercana a Génova.
- Ca Tio Morenico.

El Carrer del Moll. Es su nombre oficial.
- Ca Tio Uelo. «Tío abuelo».
- Ca Tio Pajarito / La Casa del Tio Pajarito.

El Carrer dels Motxos. Nombre oficial: Carrer del Motxó. Al parecer, antes se denominaba Calle San Benito. «Motxo» es la rama de una escoba, pero también un antiguo apellido catalán, por lo que no queda claro su significado.
- La Casa del Tio Burrero.
- La Casa de la Tia Alemana.
- La Casa de Gonsales Vicent. La Casa del Sepulcre. Ca la Tia Carmeleta.
- La Casa del Tio Silvestre.
- Ca Aldeguer.
- La Casa de Pitxó. «Pitxó» es un tipo de molusco, pechina o tellina. No se conoce la relación.
- La Casa de Quen. Pertenece a un inglés.
- La Casa de Maria de Lérida.
- La Casa de la Tia Carolina.
- La Casa de Colauet. Diminutivo de Nicolás.
- La Casa de Ferrandis.
- La Casa de Diego.
- Ca la Tia Saïca. Probablemente un mote, del que se desconoce su origen.
- La Casa de Pepa Rafaela.
- La Casa de Juanjo.
- La Casa de Juanico la Grossa.
- La Casa de Ferrandis.
- La Casa de Manolita.
- Cal Tio Hilario / La Casa d’Hilàrio.
- Cal Tio Andarí / La Casa de Carlota.
- L’Escola dels Xiquets.
- Ca Xon. Hipocorístico de Concepción.
- Ca la Bolla. «Bolla» es cada uno de los abultamientos esféricos situados uno en cada extremo del cepo de hierro de un ancla. Se desconoce el por qué de esa denominación.
- Ca la Ferranda.
- Ca Adelina.


El Carrer del Pati. Nombre oficial: Carrer d’Arzola.
- Ca Jaume Saboreo.
- La Magazent de Collonet. Era un hombre adinerado, que dirigía la almadraba.
- La Casa de Don José. Era un practicante.
- La Magazent del Forner.
- La Casa del Milà.
- Cal Malaguenyo.
- Ca Tio Tonet de Uïsos.
- Ca María Tintom.
- La Casa de Tia Rossa de Palet.
- La Casa de Doloretes de Tari. «Tari», hipocorístico de Trinitario.
- La Casa de la Lleona.
- La Casa del Paito. Mote de uno de los informadores.
- Ca Balta. Reducción del nombre propio Baltasar.
- La Casa de Parrenyo. Apellido ilicitano.
- Ca Taño de Xolo. Tanto «Taño» como «Tano» son hipocorísticos de Cayetano.
- Ca Tio Falet. «Falet» es un diminutivo de Rafael.
- La Casa del Governador / El Pati / El Pàtil. El conocido edificio de arcadas interiores y patio posterior, del que se dice que La Cova dels Birros llegaba hasta sus sótanos.

Carrer del Poeta Salvador Rueda. Nombre oficial, no popular, en honor a Salvador Rueda, que residió durante un tiempo en la isla.

Carrer de la Soledat. Nombre oficial, no popular.
- Ca Tio Gato.
- Cal Tio Hilàrio.
- Ca Don Emilio.
- La Casa de la Francesa.
- La Casa de Pepeta.
- Ca Don Jerónimo. Fue un famoso capellán, de costumbres excéntricas.
- La Magazent d’Elissa.
- La Casa del Tio Calistro.
- La Casa de María Tintom.

La Plaça Gran. Nombre oficial: Plaça Gran.
- Ca Madalena.
- La Casa de Peixet.
- La Casa de la Pelilla.
- La Casa d’Alberto. Un dentista de Madrid.
- La Casa del Tio Pepe Gallegues.
- La Casa de Tomàs.
- La Casa de la Tia Xata.
- La Casa de Tunico Cabessa.
- La Casa de Teresa la Cardona.
- La Casa de Manolico la Cardona.

La Plaça de la Església / Davant de la Església.
- La Església.

La Plaça del Pati. En sus alrededores están:
- La Casa de les Monges. Era un colegio.
- El Forn de la Tia Cardona.
- La Casa del Francés. Se llamaba Pierre.

La Replaceta / La Replaceta de la Caleta / La Plaça de la caleta / La Plaça Menudeta / La Plaça del Pósit. Nombre oficial: Plaça Carloforte.
- La Casa de l’Antoniet.
- El Pòsit / L’Escola del Pòsit / L’Escola.
- Ca Tio Sento el Pipante. Era un hombre que siempre fumaba en pipa.


Els pous del poble
- El Pouet de la Bòvida. En él se ponía a remojo el esparto.
- El Pou del Cura. Delante de la Iglesia.
- El Pou de Ca Maria Tintom / El Pou del Cura. Es uno de Els Quatre Pous.
- El Pou de Ca la Morra / El Pou de Ca Peixet. Es otro de Els Quatre Pous. «Morra» es un juego en el que dos jugadores cierran una mano, y la abren simultáneamente a la vez que dicen un número inferior a diez, ganando aquél que, con el número que ha elegido, adivina la suma de los dedos extendidos de ambas manos.
- El Pou de Ca Taneta / EI Pou de la Tia Taneta / El Pou de Vissitassion. Otro de Els Quatre Pous.
- El Pou de la Cantera. Está junto al Portal de la Cantera. En la fecha del estudio, convertido en el pozo negro de la red de alcantarillado.
- El Pou de Maria la Xata / El Pou de Maria de l’Estanc.
- El Pou del Pal / El Pou de la Pouera.
- Els Quatre Pous. Situados en cada uno de las cuatro esquinas de la Plaça Gran.


El sistema defensiu
Murallas, portales y accesorios defensivos.

La Bòvida / Les Bòvedes. Construcción subterránea del sector NO de la muralla. Se dice que en ellas había ruedas de hilar, y que se hacían cuerdas de esparto.
La Casserna. Era un cuartel destinado a alojamiento de tropas, que fue derruido para construir con su piedra El Faro, ya que no era de utilidad y sí hacía falta ese nuevo edificio.
Les Covetes. Cámaras construidas dentro de la muralla del SE, que sirvieron de viviendas.
La Garita de Baix del Forn. Todas las garitas de las murallas han desaparecido.
La Garita de la Bòvida.
La Garita de Cap Llobarros.
La Garita de la Pouera.
La Muralla de Cap de Barros.
La Muralla de Ferrandis. En la parte del NO, junto a La Bòvida.
La Muralla de la Església.
La Muralla de la Pouera.
El Pla de la Muralla. Sobre La Muralla de la Pouera.
El Portal de la Caleta. Abierto hacia El Campo. Contiene la Puerta de San Rafael.
El Portal de la Cantera. Una inscripción muy deteriorada, ocupando las dos jambas de la Puerta de San Gabriel, coronada por la flor de lis, recuerda su construcción en tiempos de Carlos III.
El Portal del Moll. Era el lugar de entrada a la población, cuando se llegaba por mar. La cerraba la Puerta de San Miguel. 


El Camp
Lugares, caminos, edificios, depósitos de agua.

La Balsa de la Faroleta / Les Balses de la Faroleta / La Faroleta. Depósito de agua que da nombre a La Platja de la Faroleta.
Les Balses de la Casa del Camp / Les Balses de la Torre. Son dos depósitos de agua, situados no muy lejos de La Torre.
Les Balses del Poble. Están en la parte más estrecha de la isla, cerca de La Purissimeta.
Les Calderes del Burrero. Era el lugar donde se teñían las redes. El edificio ya no existe. Ahora es una zona de palmeras, en las afueras de la población.
El Camí de Cala Rata.
El Camí de la Casa del Camp / El Camí del Faro.
El Camí del Cementeri.
El Camí de les Paleres.
El Camí de la Torre / El Camí del Castell / El Camí del Quartel.
El Camp. Es toda la parte de la isla no ocupada por la población, a partir del Portal de la Caleta.
La Casa de l’Almadrava / La Magazent de l’Almadrava. Servía para guardar los utensilios de la almadraba.
La Casa del Camp / La Caseta del Camp. Edificio medio derruido, entre El Faro y La Torre, donde vivían los labradores de la isla.
La Caseta de la Balsa. Cercana a Les Balses del Poble.
La Caseta de Cala Rata / La Caseta de l’Almadrava / La Casa de l’Almadrava. Pequeña caseta sobre La Cala Rata, frente a La Galera, donde se guardaba parte de los aperos de la almadraba.
La Caseta del Peix. Ya no existe. Era un edificio que servía de lonja, situado en las afueras de la población, no muy lejos de El Serrallo.
El Cementeri / El Cementeri Nou. En el extremo oriental de Tabarca, en la parte más alejada de El Poble. Los antropónimos que aparecen a las lápidas sepulcrales delatan el origen italiano de los po­bladores tabarquinos.
El Cementeri Vell. Estaba al lado mismo del muelle actual. Todavía se pueden apreciar sus cimientos.
La Escalera del Tio Americà. Al lado de El Poble, baja hacia El Mollet de l’Americà.
La Farola / El Faro. Está situado hacia la mitad de El Campo.
El Jardinet. Es una especie de mirador situado al lado de La Caleta.


La Magazent del Tio Blai. Este edificio era de madera, y estaba al lado mismo de El Poble, pegado a la muralla. En él se construían embarcaciones. En Tabarca se utilizan los términos «magatzem» o «magazent», según la denominación del edificio al que se refiera sea en masculino o en femenino, respectivamente.
Els Merenderos. Establecimientos comerciales emplazados en el istmo de la isla, junto a La Platja. Estos son algunos de los nombres mencionados por los informadores:
- Amparín / El Merendero Amparín / Juan.
- Frigolàndia.
- La Casa de Glòria / Glòria.
- El Mar Assul.
- El Merendero Tere / Tere / Teressina.
- Los Pesca­dores.
- El Rincón de Ramos...

Les Paleres. Chumberas en gran número entre La Torre y La Casa del Camp. Parece ser que las primeras crecieron en los alrededores de Cala Menaca.
El Piló. Es un mojón o pilón antiguo, cuya función exacta se desconoce. Está situado junto a La Mina. 
La Terra Roja / La Terra Blanca. Es la punta situada frente a Les Pedres Roges. El Tabarca la palabra «roig» se aplica a cosas de coloración rubia. Esto explica la dualidad roja / blanca del nombre de este lugar.
La Torre / El Castell / El Quartel. La tercera denominación es moderna, castellanizada («quarter» sería lo correcto) y da testimonio de la ocupación del edificio en tiempos recientes por la Guardia Civil. Es una construcción troncopiramidal, robusta, con aberturas rectangulares a la altura de la primera y la segunda plantas. El acceso está en la fachada del N, y se hace al primer piso. Tuvo una garita en cada una de las esquinas superiores. Se sabe que no es la primera torre que fue construida en la isla.



Topónimos desaparecidos del mapa de Fernando Méndez

El famoso plano de Fernando Méndez, documento cartográfico que lleva la fecha del 15 de agosto de 1766, por la toponimia que contiene es un mapa de gran interés. Como es anterior a la colonización por los italianos redimidos, podemos observar que los recién llegados han mantenido una gran parte de las denominaciones preexistentes, pero por otro lado hay otras que han desaparecido. Veamos estos últimos.

Cala de l’Espalmador. Debe coincidir con lo que actualmente es La Pouera. El «espalmador» era el lugar donde se volcaban las embarcaciones de costado, para limpiarlas de las adherencias biológicas. Era fundamental que presentara unas determinadas condiciones naturales, como son la profundidad adecuada para llegar a la costa, y el litoral arenoso.

Cala de l’Espáragol. Daba nombre a la ensenada que por la parte S formaba La Cantera, unida todavía a la isla. Lo que ahora es El Passet, era entonces un estrecho istmo que resguardaba esta caleta. Más adelante, con la extracción de la piedra para construir las murallas, La Cantera quedaría convertida en un islote. Existen dos teorías acerca de su etimología. La primera propone la derivación del griego παραχόλπος, que significa cala secundaria. La segunda considera que podría ser un diminutivo de la palabra ligur «spelüca», que lo hace como «esperuga», «espeluga» o «esplugola», que designa una cueva o cavidad sumergida, apta para dar cobijo a una embarcación. De una forma o de otra, se cae en la redundancia desde el momento en que se dice Cala de l’Espáragol.

Cala de la Guardia. Es la rinconada de La Cova del Llop Marí. El topónimo hace referencia a un punto de vigilancia situado en el lugar que ocupa la actual población, donde podría estar situada la torre documentada ya en el año 1337.

Cala pequeña de la Guardia. Vecina de la anterior, a la altura de La Cova dels Birros.


Cala de las Ratas. El mapa la sitúa vecina de la actual Cala Rata, lo que ahora se denomina Platja de la Faroleta.

Las Caletas. Al N de La Cantera.

Las Cuebas de Anguilas (tal como consta en el plano de Méndez). Donde ahora está La Cova de les Llagostes y estaba La Cova del Sucre.

Cuerbos Marines (textual de Méndez). Actualmente L’Escull Roig.

Las Ferreryas. Toda la parte N de Tabarca, desde El Port hasta La Naueta, donde se observan vetas de materiales ferruginosos que, a juzgar por el topónimo La Mina, debieron someterse a una posible explotación.

Punta del Moro y Peña del Moro. Hace pensar en la posibilidad de que el actual Cap de Moro prestase antiguamente su nombre al que ahora es Cap Llobarros.

Punta de Tierra. En La Cantera, cerca de La Punta del Bol.

La Punta Roja. Donde actualmente está La Terra Roja, cercana a La Platja Gran.

La Trancada. En el antiguo istmo de La Cantera, donde ahora está situado El Passet. Es un lugar que muestra las huellas de la actividad extractiva (proviene del verbo valenciano «trencar», romper). Hay indicios de que la antigua torre preitaliana fue construida con materiales de este lugar. El Portal de la Cantera está documentado, entre otras denominaciones, como Puerta de la Trancada.


Por último, toda colaboración es poca para salvaguardar este importante patrimonio que supone la riqueza toponímica de Nueva Tabarca. Es por ello que pedimos a nuestros lectores que, si encuentran algún error en este artículo, o conocen algún topónimo no recogido en estas líneas, por favor, describan en un comentario, en la fuente original del artículo, toda la información que posean al respecto, para así completarlo o corregirlo de forma precisa, las veces que sea necesario. Les damos las gracias de antemano.

(Artículo publicado en el blog "La Foguera de Tabarca")

 
La Asociación Cultural Alicante Vivo se reserva el derecho de moderación, eliminación de comentarios malintencionados, con lenguaje ofensivo o spam. Las opiniones aquí vertidas por terceras personas no representan a la Asociación Cultural Alicante Vivo.