7. TORRES DE DEFENSA Y REFUGIO (XVI-XVII)
¿Hay moros por la Costa?
dicho popular
dicho popular
Hay referencias a un hábitat en la huerta, especialmente en la Condomina, desde época romana (Villa Ferrer...) y musulmana. La preocupación por la protección es muy probable que justificara la existencia de edificaciones defensivas durante la Edad Media ( Menéndez Fueyo en su cronología de las torres vigía de la costa, habla de una inseguridad durante el XIV y XV en la huerta de Alicante que solamente es atendida por el manteni-miento de unas milicias a expensas de los habitantes de la zona).
Las torres como actualmente las conocemos tienen su origen como defensa ante la piratería berberisca del XVI que se producía mediante desembarcos en La Albufera , El Cabo o Playa de S. Juan. La población dispersa (en la Condomina) y semiurbana (Lloixa, San Juan, Mutxamel, Benimagrell ) debía ser considerable para justificar una piratería que en la mayoría de los casos tenía como botín las personas ( futuros esclavos que suponen un lucrativo negocio por el rescate ). A pesar de que entre las torres hay una línea visual directa y cercana se produjeron varias incursiones que afectaron a la población ( mortandad y esclavitud).
Cooper , en el prólogo a “Centinelas de la costa”, considera que durante el XIV y XV ya existieron ataques de piratas y que se aceleraron con la toma de Argel ( 1516) por Barbarroja, que posteriormente arrasa Gibraltar( (1529) y la tensión se mantiene a pesar de la toma de Túnez ( 1535 ) por parte de Carlos I.
Como explicación a la piratería Seijo busca una justificación “ en el hecho de ausencia de presas y botines de embarcaciones importantes debido al traslado del centro de interés comercial hacia el atlántico ( relaciones con América ) en detrimento del medi-terráneo”. Ello supone que los piratas que tradicionalmente operaban en este mar cam-biaran sus objetivos por los de secuestro ( esclavo = rescate = rentabilidad ). Enlaza la relación con toda la política mediterránea de Carlos I para controlar los puertos/bases piratas. En la zona de la Condomina, incluyendo Santa. Faz , Lloixa ( pequeña localidad entre S. Juan y Sta. Faz) y San Juan están documentados una serie de asaltos y razias a partir de los desembarcos de 1540,1550, 1557, 1643.
Seijo relaciona la inseguridad del campo cercano a la costa mediterránea con una cita que hace Lampérez aludiendo a la obra de José Salarí ( “Orígenes históricos de Cataluña” ). En ella se menciona que en la Baja Edad Media “ no se concedía autorización para construir casas en el campo sin la obligación de levantar, junto a ellas, una torre…. Y muchas de ellas tienen ladroneras junto a los matacanes”.,. Isidro Buades recoge un fragmento de crónica cuando las circunstancias fueron adversas ( finales del XVI) “ … los propietarios fueron apercibidos que de no acabar en la fecha marcada “ les torres que aquells tenen…. en la dita Horta…. sota pena de cinc cents florins de or “
También menciona Seijo como una medida extrema un bando del Duque de Ma-queda, lugarteniente general del Reino, por el que se prohibía “ quedarse fuera de las torres de la Condomina apenas anocheciera” y que “ todos aquellos que incumplieran esta orden no serían rescatados de manos del infiel”, quedando solamente exentos de ello los niños y los combatientes. El bando/ley se derogó en 1595 con el Marqués de Denia, Virrey de Valencia, para que se pudieran hacer negociaciones con los piratas para la liberación de los cautivos( de esta faceta se solía encargar la Orden de los Mercedarios)
Conviene recordar sin embargo que la actividad del corso era normal durante toda la Edad Media. Simplemente con el tiempo cambian el protagonista y la víctima : en la época medieval “ los corsos “ eran cristianos y en el XVI cambian los papeles y “ el corso “ es berberisco. El puerto de Alicante, a finales de dicha época tenía casi tantos ingresos por comercio como por impuestos de actividades corsarias (saqueos, rehenes, venta de los mismos...) lo cual proporcionaba buenos ingresos al fisco y a los notables de la ciudad
La documentación existente sobre las torres se basa en los datos del Deán Bendicho, Viravens, Figueras Pacheco, Pastor de la Roca, que a su vez han sido recopilados , analizados y reelaborados por diversos autores: Sala y Pérez, Varela.
Para Seijo se trata de “ casas con torre anexa” ya que se puede comprobar en todas ellas que la sillería de la torre ( perfecta en los angulares) no está enlazada con los de la casas casa ( que es posterior)( no existe un solo diente o adaja que establezca la unión). Para otros autores la torre y casa son coetáneas ( Sarrió ).
La mayoría de los autores dan por hecho que las torres son del XVI. Sin embargo Agustín Pareja, en su artículo “ las torres de los moros ”considera que aunque es probable dicha datación es posible que las fuentes hablen más bien de las torres de la costa (redondas) a diferencia de las de la huerta ( cuadradas):
“Se conserva documentación correspondiente al virreinato de Vespasiano Gonzaga bajo cuyo mandato "se realizaron diversas torres, atalayas y castillos en la costa bajo la dirección del inge-niero Juan Bautista Antonelli".(…) “Algunas torres conservan inscripciones grabadas en las piedras que hacen referencia a los años 15... y a Felipe II. A nuestro entender estos argumentos no pueden considerarse definitivos”(…)
“Por otro lado los documentos sólo permiten identificar con seguridad a las torres vigía de costa.”
Dicen nuestros cronistas locales "En vista de ello, por el año 1554, el entonces virrey de Valencia, Duque de Maqueda, realizó una visita para estudiar y tratar de resolver la an-gustiosa situación de cuatro torres de vigía, que quedaron emplazadas en el Barranco de Aguas, junto a la Isleta de Campello, en el Cabo del Alcodre( Cabo de las Huertas) y en Agua Amarga. Las cuatro torres quedaron terminadas en el tiempo récord, para aquellos tiempos de tres años, gracias al interés y generosidad del Duque de Maqueda. Estaban servidas cada una por dos hombres de a pié y dos de a caballo.
Cuando vislumbraban por el horizonte la aparición de los barcos piratas, encendían gran-des fogatas, con las que avisaban unas torres a otras, mientras que los caballistas salían a todo correr de sus cabalgaduras, para informar a las autoridades y pueblos inmediatos, con el fin de que pudieran preparar sus defensas y ponerse a salvo".
Funcionalmente conviene distinguir los tres tipos de torres existentes en la zona:
a) torres vigía de la costa ( se encuentran en la zona mediterránea desde Cartagena has-ta Rosas, intentando crear una “ muralla defensiva”). Las más cercanas a Alicante son Tamarit ( salinas de Braç del port de Santa Pola), Escalotes ( Santa Pola), la Atalayota (actual faro de Santa Pola), el Carabaçí, l'Alcodra ( cabo de la Huerta), El Campello (Els Banyets), el Charco (La Vila)..
b) torres defensivas de núcleos de población ( la de Santa Faz 1557-80) y Mutxamel ( campanario 1513 ). Disponían de guarnición y artillería.
c) torres refugio: son más pequeñas y su construcción se acelera en la segunda mitad del XVI ( la de Maimona se documenta como refugio en la incursión pirata de 1550). A este tipo de torres se le anexionará posteriormente una vivienda que mantendrá en su interior el acceso a la torre que había sido exterior, de pequeñas dimensiones y situado generalmente a partir del talud.
La sensación de inseguridad reinante durante la segunda mitad del XVII hará que personajes notables alicantinos ( Juan Bautista Martí, Capitán Boasio,..) ) formen a sus expensas un grupo de milicias encargada de la defensa de la costa obteniendo el reconocimiento real.
En cuanto su número hay que situarlo entre 23 ( según Menéndez habla del XVI), 24 ( Seijo) y 28 ( A.Pareja), según los autores . La mayoría están situadas entre la carre-tera N- 332 y la playa, principalmente en el camino de Benimagrell y la Cruz de Piedra. Torres con planteamientos similares, en menor número, se pueden encontrar en la zona de las Paulinas ( una ) y en el campo de Elche. La torre Serna ( Penáguila ) tendría la misma función.
TIPOLOGÍA
En general la torre es una unidad arquitectónica independiente a la que se une la vivienda ( por una, dos o tres caras)( en Mitja Lliura la casa siempre ha estado se parada de la torre).Todas disponen de semisótano con techo de bóveda rebajada que en ocasio-nes se ha utilizado como aljibe pudiendo acceder a él desde la planta baja. En la última restauración de Sarrió ( 2009 ) se podía apreciar otro sótano similar a un nivel inferior del propio talud y sin aparente entrada desde el exterior ni comunicación con el semisótano.
El acceso a la torre queda a metro y medio del suelo ( para protección ) . Se trata de puertas estrechas, de baja altura ( 1’50 x 0’60 m) y con arco de medio punto. De esta forma era fácil atrancar la puerta desde dentro. Cuando posteriormente se añada la casa la puerta de acceso a la torre quedará en el interior y para acceder a ella habrá unos pel-daños( Boter).
A partir de esta planta sube una estrecha escalera helicoidal , realizada en yeso ( Boter, Conde, Mitja Lliura, Ciprés, ), a veces con caja ( Reixes ) a las plantas superiores (dos –Rizo- , tres o cuatro –Boter, Fabián/Guixot-) . En cada planta dispone de aspilleras( posteriormente, al convertirse en ventanas, tendrán en su interior un banco lateral de obra ).
En la parte superior ( terraza ) se pueden comprobar todavía las gárgolas a los cuatro lados, matacanes sobre ménsulas y almenas ( algunas muy deterioradas o casi en tierra -Torre Plàcia- y otras mejor conservadas como la de Santa Faz con garitones en los cuatro ángulos). Cuando dejan de tener carácter defensivo se abren ventanas y balcones en algunos casos (p.e.La Cadena).
Los techos son de vigas paralelas de madera con interespacios abovedados (yeso y cañizo). Los muros son de carga . Al exterior son de sillares de arenisca (de la sierra de S. Julián) en las esquinas y sillar o sillarejo el resto del muro. Al interior están revocados con cal y arena . La zona intermedia está rellenado con ripio y ésta es la zona por donde empiezan a agrietarse los muros cuando les entra el agua de la lluvia. Cuando la torre es de talud se parte de una anchura de 3 m. para ir reduciendo hasta los 50 cm. de anchura que tendrá el muro de la torre.
Un esquema de clasificación, adornos y remates lo sintetiza Seijo ( “La Vivienda popular..”).
Siguiendo la clasificación estructural ( y de materiales ) de Seijo y de Menéndez Fueyo podemos distinguirlas tres tipos de torres:
a) torres construidas a principios del siglo XVI ( ej. Torre Bosch – integrada en la casa-, la de Bonanza, la de Ansaldo, ).Suelen ser pequeñas torres sin talud, prismáticas y construidas de mampostería con sillares en sus esquinas
b) torres construidas en la segunda mitad del siglo XVI ( ej.: Sarrió, Mitja Lliura, Plàcia, Conde, Boter, Reixes, Don García, Alameda, Ciprés, Paulinas, Santiago..) Todas presentan talud , tres o cuatro alturas ,están construidas a base de sillarejos o de sillares bien trabajados y tienen planta rectangular.
Tienen la entrada en el W. Destacan por su carácter defensivo las de Mutxamel (1513)( actual campanario de la Iglesia ) y la de Santa. Faz.( 1557-80)( contigua al Monasterio)
c) torres del siglo XVII (ej. :El Soto, La Cadena, Alameda, Villagarcía-D.Vicent, Aguilas, Cacholi, Rizo...). Son las más bellas ya que están totalmente construidas con sillares trabados con mortero de cal. El talud ha sido sustituido por un plinto y acaban en cornisas rematadas de almenas. Algunas, como la del Capitán Boasio o Villagarcía) son troncopiramidales. Suelen tener la entrada en el W. Algunas de estas torres tienen semisótano con pequeña ventana al exterior ( La Cadena, Villagarcía)
Las torres como actualmente las conocemos tienen su origen como defensa ante la piratería berberisca del XVI que se producía mediante desembarcos en La Albufera , El Cabo o Playa de S. Juan. La población dispersa (en la Condomina) y semiurbana (Lloixa, San Juan, Mutxamel, Benimagrell ) debía ser considerable para justificar una piratería que en la mayoría de los casos tenía como botín las personas ( futuros esclavos que suponen un lucrativo negocio por el rescate ). A pesar de que entre las torres hay una línea visual directa y cercana se produjeron varias incursiones que afectaron a la población ( mortandad y esclavitud).
Cooper , en el prólogo a “Centinelas de la costa”, considera que durante el XIV y XV ya existieron ataques de piratas y que se aceleraron con la toma de Argel ( 1516) por Barbarroja, que posteriormente arrasa Gibraltar( (1529) y la tensión se mantiene a pesar de la toma de Túnez ( 1535 ) por parte de Carlos I.
Como explicación a la piratería Seijo busca una justificación “ en el hecho de ausencia de presas y botines de embarcaciones importantes debido al traslado del centro de interés comercial hacia el atlántico ( relaciones con América ) en detrimento del medi-terráneo”. Ello supone que los piratas que tradicionalmente operaban en este mar cam-biaran sus objetivos por los de secuestro ( esclavo = rescate = rentabilidad ). Enlaza la relación con toda la política mediterránea de Carlos I para controlar los puertos/bases piratas. En la zona de la Condomina, incluyendo Santa. Faz , Lloixa ( pequeña localidad entre S. Juan y Sta. Faz) y San Juan están documentados una serie de asaltos y razias a partir de los desembarcos de 1540,1550, 1557, 1643.
Seijo relaciona la inseguridad del campo cercano a la costa mediterránea con una cita que hace Lampérez aludiendo a la obra de José Salarí ( “Orígenes históricos de Cataluña” ). En ella se menciona que en la Baja Edad Media “ no se concedía autorización para construir casas en el campo sin la obligación de levantar, junto a ellas, una torre…. Y muchas de ellas tienen ladroneras junto a los matacanes”.,. Isidro Buades recoge un fragmento de crónica cuando las circunstancias fueron adversas ( finales del XVI) “ … los propietarios fueron apercibidos que de no acabar en la fecha marcada “ les torres que aquells tenen…. en la dita Horta…. sota pena de cinc cents florins de or “
También menciona Seijo como una medida extrema un bando del Duque de Ma-queda, lugarteniente general del Reino, por el que se prohibía “ quedarse fuera de las torres de la Condomina apenas anocheciera” y que “ todos aquellos que incumplieran esta orden no serían rescatados de manos del infiel”, quedando solamente exentos de ello los niños y los combatientes. El bando/ley se derogó en 1595 con el Marqués de Denia, Virrey de Valencia, para que se pudieran hacer negociaciones con los piratas para la liberación de los cautivos( de esta faceta se solía encargar la Orden de los Mercedarios)
Conviene recordar sin embargo que la actividad del corso era normal durante toda la Edad Media. Simplemente con el tiempo cambian el protagonista y la víctima : en la época medieval “ los corsos “ eran cristianos y en el XVI cambian los papeles y “ el corso “ es berberisco. El puerto de Alicante, a finales de dicha época tenía casi tantos ingresos por comercio como por impuestos de actividades corsarias (saqueos, rehenes, venta de los mismos...) lo cual proporcionaba buenos ingresos al fisco y a los notables de la ciudad
La documentación existente sobre las torres se basa en los datos del Deán Bendicho, Viravens, Figueras Pacheco, Pastor de la Roca, que a su vez han sido recopilados , analizados y reelaborados por diversos autores: Sala y Pérez, Varela.
Para Seijo se trata de “ casas con torre anexa” ya que se puede comprobar en todas ellas que la sillería de la torre ( perfecta en los angulares) no está enlazada con los de la casas casa ( que es posterior)( no existe un solo diente o adaja que establezca la unión). Para otros autores la torre y casa son coetáneas ( Sarrió ).
La mayoría de los autores dan por hecho que las torres son del XVI. Sin embargo Agustín Pareja, en su artículo “ las torres de los moros ”considera que aunque es probable dicha datación es posible que las fuentes hablen más bien de las torres de la costa (redondas) a diferencia de las de la huerta ( cuadradas):
“Se conserva documentación correspondiente al virreinato de Vespasiano Gonzaga bajo cuyo mandato "se realizaron diversas torres, atalayas y castillos en la costa bajo la dirección del inge-niero Juan Bautista Antonelli".(…) “Algunas torres conservan inscripciones grabadas en las piedras que hacen referencia a los años 15... y a Felipe II. A nuestro entender estos argumentos no pueden considerarse definitivos”(…)
“Por otro lado los documentos sólo permiten identificar con seguridad a las torres vigía de costa.”
Dicen nuestros cronistas locales "En vista de ello, por el año 1554, el entonces virrey de Valencia, Duque de Maqueda, realizó una visita para estudiar y tratar de resolver la an-gustiosa situación de cuatro torres de vigía, que quedaron emplazadas en el Barranco de Aguas, junto a la Isleta de Campello, en el Cabo del Alcodre( Cabo de las Huertas) y en Agua Amarga. Las cuatro torres quedaron terminadas en el tiempo récord, para aquellos tiempos de tres años, gracias al interés y generosidad del Duque de Maqueda. Estaban servidas cada una por dos hombres de a pié y dos de a caballo.
Cuando vislumbraban por el horizonte la aparición de los barcos piratas, encendían gran-des fogatas, con las que avisaban unas torres a otras, mientras que los caballistas salían a todo correr de sus cabalgaduras, para informar a las autoridades y pueblos inmediatos, con el fin de que pudieran preparar sus defensas y ponerse a salvo".
Funcionalmente conviene distinguir los tres tipos de torres existentes en la zona:
a) torres vigía de la costa ( se encuentran en la zona mediterránea desde Cartagena has-ta Rosas, intentando crear una “ muralla defensiva”). Las más cercanas a Alicante son Tamarit ( salinas de Braç del port de Santa Pola), Escalotes ( Santa Pola), la Atalayota (actual faro de Santa Pola), el Carabaçí, l'Alcodra ( cabo de la Huerta), El Campello (Els Banyets), el Charco (La Vila)..
b) torres defensivas de núcleos de población ( la de Santa Faz 1557-80) y Mutxamel ( campanario 1513 ). Disponían de guarnición y artillería.
c) torres refugio: son más pequeñas y su construcción se acelera en la segunda mitad del XVI ( la de Maimona se documenta como refugio en la incursión pirata de 1550). A este tipo de torres se le anexionará posteriormente una vivienda que mantendrá en su interior el acceso a la torre que había sido exterior, de pequeñas dimensiones y situado generalmente a partir del talud.
La sensación de inseguridad reinante durante la segunda mitad del XVII hará que personajes notables alicantinos ( Juan Bautista Martí, Capitán Boasio,..) ) formen a sus expensas un grupo de milicias encargada de la defensa de la costa obteniendo el reconocimiento real.
En cuanto su número hay que situarlo entre 23 ( según Menéndez habla del XVI), 24 ( Seijo) y 28 ( A.Pareja), según los autores . La mayoría están situadas entre la carre-tera N- 332 y la playa, principalmente en el camino de Benimagrell y la Cruz de Piedra. Torres con planteamientos similares, en menor número, se pueden encontrar en la zona de las Paulinas ( una ) y en el campo de Elche. La torre Serna ( Penáguila ) tendría la misma función.
TIPOLOGÍA
En general la torre es una unidad arquitectónica independiente a la que se une la vivienda ( por una, dos o tres caras)( en Mitja Lliura la casa siempre ha estado se parada de la torre).Todas disponen de semisótano con techo de bóveda rebajada que en ocasio-nes se ha utilizado como aljibe pudiendo acceder a él desde la planta baja. En la última restauración de Sarrió ( 2009 ) se podía apreciar otro sótano similar a un nivel inferior del propio talud y sin aparente entrada desde el exterior ni comunicación con el semisótano.
El acceso a la torre queda a metro y medio del suelo ( para protección ) . Se trata de puertas estrechas, de baja altura ( 1’50 x 0’60 m) y con arco de medio punto. De esta forma era fácil atrancar la puerta desde dentro. Cuando posteriormente se añada la casa la puerta de acceso a la torre quedará en el interior y para acceder a ella habrá unos pel-daños( Boter).
A partir de esta planta sube una estrecha escalera helicoidal , realizada en yeso ( Boter, Conde, Mitja Lliura, Ciprés, ), a veces con caja ( Reixes ) a las plantas superiores (dos –Rizo- , tres o cuatro –Boter, Fabián/Guixot-) . En cada planta dispone de aspilleras( posteriormente, al convertirse en ventanas, tendrán en su interior un banco lateral de obra ).
En la parte superior ( terraza ) se pueden comprobar todavía las gárgolas a los cuatro lados, matacanes sobre ménsulas y almenas ( algunas muy deterioradas o casi en tierra -Torre Plàcia- y otras mejor conservadas como la de Santa Faz con garitones en los cuatro ángulos). Cuando dejan de tener carácter defensivo se abren ventanas y balcones en algunos casos (p.e.La Cadena).
Los techos son de vigas paralelas de madera con interespacios abovedados (yeso y cañizo). Los muros son de carga . Al exterior son de sillares de arenisca (de la sierra de S. Julián) en las esquinas y sillar o sillarejo el resto del muro. Al interior están revocados con cal y arena . La zona intermedia está rellenado con ripio y ésta es la zona por donde empiezan a agrietarse los muros cuando les entra el agua de la lluvia. Cuando la torre es de talud se parte de una anchura de 3 m. para ir reduciendo hasta los 50 cm. de anchura que tendrá el muro de la torre.
Un esquema de clasificación, adornos y remates lo sintetiza Seijo ( “La Vivienda popular..”).
tipos de almenas de cantería,(4,5,6,7)
8 (almena de ladrillo macizo)
9/10(remates de torre), 11( remate de arcos)
8 (almena de ladrillo macizo)
9/10(remates de torre), 11( remate de arcos)
Siguiendo la clasificación estructural ( y de materiales ) de Seijo y de Menéndez Fueyo podemos distinguirlas tres tipos de torres:
a) torres construidas a principios del siglo XVI ( ej. Torre Bosch – integrada en la casa-, la de Bonanza, la de Ansaldo, ).Suelen ser pequeñas torres sin talud, prismáticas y construidas de mampostería con sillares en sus esquinas
b) torres construidas en la segunda mitad del siglo XVI ( ej.: Sarrió, Mitja Lliura, Plàcia, Conde, Boter, Reixes, Don García, Alameda, Ciprés, Paulinas, Santiago..) Todas presentan talud , tres o cuatro alturas ,están construidas a base de sillarejos o de sillares bien trabajados y tienen planta rectangular.
Tienen la entrada en el W. Destacan por su carácter defensivo las de Mutxamel (1513)( actual campanario de la Iglesia ) y la de Santa. Faz.( 1557-80)( contigua al Monasterio)
c) torres del siglo XVII (ej. :El Soto, La Cadena, Alameda, Villagarcía-D.Vicent, Aguilas, Cacholi, Rizo...). Son las más bellas ya que están totalmente construidas con sillares trabados con mortero de cal. El talud ha sido sustituido por un plinto y acaban en cornisas rematadas de almenas. Algunas, como la del Capitán Boasio o Villagarcía) son troncopiramidales. Suelen tener la entrada en el W. Algunas de estas torres tienen semisótano con pequeña ventana al exterior ( La Cadena, Villagarcía)