MIGUEL HERNANDEZ VISTO POR UN HIPOCONDRIACO.

Desde siempre he sentido curiosidad por los ojos claros y enormes de este retrato, magnifico, de Miguel Hernandez.

A su muerte, se negaron a cerrarse. Se rebelaron contra el final. Costó tiempo y aún así quedaron entreabiertos.

Yo era un niño enfermizo y débil. Ahora soy un adulto neurótico y algo hipocondríaco. Quizá mi capacidad para empatizar con el prójimo impida mi total radicalización en la hipocondria. Esta es el resultado de mirarse muy para adentro. De falta de solidaridad. De creerse el centro del Mundo. La empatía te lleva a comprender el ser de lo demás. Esa posibilidad de empatizar y esa hipocondria no radical, contradictorias pero humanas, me llevaron a querer ser médico. No pude. Una enfermedad se llevó a mi padre cuando yo tenia 14 años. Había que vivir. Había que trabajar. Mi padre, jefe de Tabacalera dejo una baja pensión. Una pensión de mierda. De las que daba el Régimen, el Movimiento. Hubo de pasar quince años para que las pensiones se dignificasen algo. Es decir, forme una familia y por fin mi madre podía vivir dignamente. Pero era tarde. Me quedé sin mi pretensión de estudiar medicina. Yo quería saber el por qué del motor del ser humano. El no poder ser médico me convirtió en simple curioso.

UNOS OJOS

Buero pintó a Miguel en Conde de Toreno. Siempre pensé que se había pasado con los ojos. Pero con el tiempo y la libertad llegaron las fotos. En efecto: Miguel tenia unos ojos enormes.

Ojos de brotola. Así llamábamos en mi infancia a aquello que parecía que sus ojos se les salían de la cara. ¿Por que era así? ¡Padece de tiroides! Esa era la respuesta. No se padece de tiroides como no se padece de pierna. El mal funcionamiento de la glándula tiroidea, en el cuello, produce como consecuencia del hipertiroidismo una seria de problemas. Más adelante los veremos.

PRIMER VIAJE A MADRID.

Es en el Madrid de la nueva República donde Miguel intenta abrirse paso entre los intelectuales que escriben en aquel fructífero momento. Pero su salud se resiente. Se le detecta una afección pulmonar e hipertiroidismo de nacimiento. Este dato no es tenido en cuenta en mucho tiempo. Parece ser que tampoco en Benicasim.

Miguel sufre una detención en 1936. En su segunda estancia en Madrid. El 6 de enero. Fue en San Fernando del Jarama. El no lo dice, pero iba en acompañado de Maruja Mallo, la pintora. Es reclamado para identificarse por la Guardia Civil. Miguel no lleva la cédula de identificación. Amable y educado contesta con una sonrisa y dice que es poeta. Su aspecto es el de siempre. Viste humilde, calza humilde y solo lleva papeles escritos. Es amenazado, golpeado a mano y con sus propias llaves en la cabeza. El ambiente está caldeado. Se acercan las elecciones de febrero. Hay miedo y el facherio empieza a actuar, a terminar de organizarse. Esta detención y la paliza producen protestas del mundo de la Cultura. Esta parte de su vida contada por Manuel Parra y Cerdan Tato formo parte de las charlas impartida en 80 Mundos.

El comienzo de la Guerra y su entrada en el 5º Regimiento en Septiembre, la lucha, las trincheras, la actividad cultural. No para. Y es en 1938 cuando su salud se resiente. No puede con su alma, como vulgarmente se dice. Los que le conocen se dan más cuenta que él mismo. Es enviado a Benicasim. Es en marzo de 1938. En esta población, junta a la costa se han habilitado una serie de chalets como hospital y casa de reposo. Allí coincide con un joven Buero Vallejo que presta servicio en dicha zona hospitalaria. Miguel padece de fuertes dolores de cabeza y de fatiga. Se le diagnostica ANEMIA CEREBRAL. Recordemos que ha sido diagnosticado de hipertiroidismo. Este puede producir una disminución del hematocrito. Es decir, cantidad de glóbulos rojos en sangre. El aumento del plasma en sangre crea una pseudo anemia por hemodilución. Como síntomas de este problema tenemos sus consabidas cefaleas y su cansancio crónico. Recordemos que algunos "biógrafos de Miguel" hablan de los golpes que recibe en la cabeza por parte de su padre o del abusivo uso del sexo que hace tras la boda. El problema era otro.

Es tras Benicasim cuando ya en Orihuela visita a Don Arsenio Valoria Infante, Director Médico del Hospital de Orihuela. Es entonces cuando se detecta un daño pulmonar y dicho doctor efectúa una punción pleuro pulmonar. Extrae líquido seropurulento. Es decir ya tenemos antecedentes de sus dolencias derivadas del hipertiroidismo y un primer paso en sus pulmones enfermos. Tras esta extracción, Miguel mejora. Esto puede leerse con gran detalle en el magnifico libro de José Luis Ferris "MIGUEL HERNANDEZ. Pasiones, cárcel y muerte de un poeta".Pero lo que le deviene a nuestro hombre solo puede minar su salud. Llevo años pensando en esto. He visto amigos con problemas similares que se han recuperado. Hoy en día los males de Miguel tiene cura más o menos fácil. Entonces no tanto, pero Miguel topo con dos "males" mortales de necesidad. Se llamaban Almarcha y Vendrell.

PORTUGAL. HUELVA. 1939

En Portugal Miguel es detenido al tratar de vender un reloj regalado por Vicente Alexandre. Es golpeado y devuelto a Huelva donde comienza su primer circuito carcelario. Llega a orinar sangre por causa de los golpes. Es un hombre fuerte y su cabeza está más en su Josefina y en Manolillo que en el mismo. Les oculta su situación, los maltratos. Ha sufrido mucho en poco tiempo. La guerra y la defensa de Madrid, el asesinato de su suegro el Guardia Civil Manuel Manresa en Elda, la muerte de su primer hijo Manuel Ramón.... ¡la Victoria!.

Circunstancias no precisadas del todo hacen que desde la Prisión de Torrijos, en Madrid, fuera puesto en libertad y regresara a su familia. Quizás aquí, Miguel sana. Es lógico pues esta con su Josefina y tiene en sus brazos a Manolillo. Pero la felicidad dura poco en casa del pobre. Vuelve a ser detenido y pasa un nuevo Calvario. Mi padre habla de Yeserias y Conde de Toreno como de dos infiernos. De allí se salia rumbo al paredón en el mayor número de los casos. Veías la muerte en las caras de los compañeros y no sabias si ellos en la tuya. Al ser enviado a Palencia, lo hace con buen tiempo, pero no sale de allí hasta el momento más crudo del invierno de principios de 1941. En la Prisión Provincial de Palencia sufre congelaciones en los pies. Esto me lo cuenta mi propio padre cuando lo encuentra en Ocaña, pero Fernando Fernandez Revuelta le relata a Eutimio Marin y este lo escribe en Canelobre que Miguel también llegó con bronquitis contraída en Palencia. Es en Ocaña cuando realiza cursos de pintura y de poesía. Recomiendo repasar mis otros artículos escritos aquí, en Alicante Vivo. Pero empieza a decaer nuevamente al aparecerle una fuerte bronquitis con hemorragias. Sale para Alicante, al fin, el 25 de Junio de 1941 y llega el 29 del mismo mes. Pasa por dos cárceles la de Alcalá y la de Albacete. Hay varias versiones, pero el 29 llega a nuestra capital.

MARCOS ANA.

Otro grande de nuestra literatura pasada por la cárcel, es Marcos Ana. Cuando cumplió 90 años dijo que solo tenia 67. Lo otros 23 se habían quedado en las cárceles del Franquismo. Le pilla la guerra en Alcalá de Henares con 16 años recién cumplidos. Sale del campo de Albatera por su cara de niño, pero es encarcelado a los 19 años, saliendo 23 años después. En 1960 tuvo el valor de escribir una obra de teatro que se estreno en el Penal de Burgos. se llama Homenaje a Miguel Hernandez. Sino Sangriento. Allí describe el fin de Miguel y da un repaso a su vida. Lo alucinante es que la representación se hizo en la cárcel, con presos políticos y comunes y a escondidas. Tengo una copia que me dio mi amigo Manuel Parra. Parte del texto de esta obra se usó en la presentación de su último libro.

MIGUEL HERNANDEZ Y SU SALUD EN ALICANTE.

Este capitulo lo dejaré para un próximo trabajo. Aquí hay mucha "tela". Veremos testimonios, fotos desconocidas de dibujos, estudios de otros y sobre todo el fin de la vida terrena de un hombre que no hizo mal a nadie. Su cuerpo salió por una puerta lateral de la Calle Santa María Mazzarello. Este rastillo lateral tenia entrada al patio de la enfermería. Veremos fotos alzadas de la cárcel y comentaremos noticias que acabo de recibir recientemente de una de los pocos testigos directos que quedan de aquella tragedia.

También haremos una reflexión de lo que un ser humano puede aguantar. De como se quiebra la salud del más fuerte ante la maldad humana. De cuenta maldad puede contener un solo ser incluso con sotana.

Os dejo esta foto final con el rastrillo lateral de la cárcel y la vista de uno de los muros interiores.