Les Fogueres del Raval Roig
Hay barriadas en Alicante, en las que tradicionalmente las propias fiestas del barrio han desplazado a nuestra Fiesta Oficial de Fogueres, o simplemente se han mantenido al margen de cualquier evento festero. Comenzando por este segundo caso, son ejemplos notorios La Albufereta, que sólo plantó fogueres los años 1981 y 1982, o Vistahermosa, que únicamente plantó una foguera infantil en 1945.
Pero en el caso de los barrios de más arraigo festero en Alicante por antigüedad y tradición, se dan los dos extremos. Mientras que por ejemplo en San Antón coexisten las entrañables fiestas de “El Porrate”, que este año han cumplido nada menos que 500 años, con las comisiones de fogueres de San Antón Alto y San Antón Bajo, en otros casos se llegó a intentar crear comisión de fogueres sin conseguir continuidad, como son los casos de Tabarca en 1965 (si bien el pasado año 2009 se plantaría una réplica de la misma) y San Gabriel en 1966.
Mención aparte merece el caso de las Fiestas del Raval Roig en honor a la Virgen del Socorro, las más antiguas junto con las de San Antón, y que sí se subirían al tren de les Fogueres de Sant Joan en los años de la II República, desapareciendo como ésta con la llegada de la contienda nacional. La Foguera Arrabal Roig nació en 1933, y tras descansar un año volvió a plantar en 1935 (en este caso tanto monumento adulto como infantil) y 1936. Vamos a conocer las peculiaridades de su breve existencia festera.
Foguera Arrabal Roig 1933 (AMA)
En el Expediente 22/1933 del fondo documental de les Fogueres de Sant Joan que se conserva en el Archivo Municipal de Alicante, encontramos la incorporación del entrañable Raval Roig de nuestra ciudad a las hoy Fiestas Oficiales. Así, la que entonces se denominó Foguera Arrabal Roig 1933, fue obra del componente del colectivo valenciano “Unión Arte” José Pérez, y fue titulada según su llibret “Llevant lo vell per a posar lo nou”. Fue plantada en la Plaza de Topete, con unas dimensiones de 6 x 5 metros de base y 8,5 metros de altura. Por proximidad, se podría decir que pertenecería al actual distrito de La Marina, o tal vez de Plaza de Santa María o más probablemente de Passeig de Gómiz.
El Presidente de la Foguera, José Pérez Ruso, muy probablemente de ascendencia tabarquina, que aunque coincida nombre y apellido no tenía nada que ver con el constructor del monumento, firmaba y presentaba su Solicitud de Plantà en Secretaría del Ayuntamiento el día 3 de junio de 1933, que la cedía en la misma fecha a la Comisión de Fomento para quedar aprobada el día 5. Adjuntaba un boceto en acuarela, del que se conserva una fotografía autorizada mediante sello de Alcaldía.
La solicitud hacía referencia al significado de la foguera, indicando que ésta “...desarrolla el tema, de demoler lo arcaico y vetusto, reemplazándolo por otras edificaciones modernas que prestigien la población...”. Así la comentaba el Número Extraordinario de Fogueres 1934 de “El Tio Cuc”, que además la rebautizaba con el lema “¡Al agua patos!”: “Representa a un barrendero barriendo y tirando al mar todo lo viejo que hay en Alicante y al lado un moderno rascacielos que es la admiración de los amantes del progreso”.
Tras un año sin plantar, la Foguera Arrabal Roig reaparece con fuerza en 1935, plantando dos monumentos, una foguera adulta y una foguera infantil. La primera de ellas, de acuerdo con el Expediente H-22/1935 que se conserva en el AMA, fue costruida por los hermanos Juan y Gaspar Esteve García, que firmaban como “Esteve Hermanos”. Según el llibret se titulaba “Lo que puede ser”, concursó en Categoría B y fue merecedora del Tercer Premio de la citada categoría. Sus 8 x 6 metros de base y 9 metros de altura fueron plantados como en la anterior ocasión en la calle Virgen del Socorro, a la altura de la Plaza de Topete del popular barrio de nuestra ciudad.
Es igualmente José Pérez Ruso, en calidad de Presidente de la Foguera, quien el 6 de junio de 1935 hace entrada en el Registro de la Secretaría del Ayuntamiento de la Solicitud de Plantà fechada 4 de junio, que sería admitida sin problemas. Se conservan dos fotos autorizadas de otros tantos bocetos en acuarela de las caras frontal y posterior del monumento, esta última sin firma.
Foguera Arrabal Roig 1935 (AMA)
El mencionado documento incluía una breve explicación del monumento: “Una vista de la actual situación de la Calle Mare Nostrum, con la barandilla que da a la playa y la parte montañosa, fea y antiestética que ofrece ahora, y, en la parte opuesta de la hoguera, lo que podría ser este sector construyendo una escalinata artística que facilitase el paso hasta la playa, borrando, al paso, esa vista fea de la parte montañosa. Los edificios modernos que se construirían en esa parte de la calle de Mare Nostrum, así como un gran Hotel turístico, denominado de Mare Nostrum, y exposición de algunas escenas de playa, a cargo de turistas alojados en el citado Hotel del que descienden, ataviados en traje de playa, por la escalinata futura desde su alojamiento a las arenas del Postiguet”.
Es curioso observar que la Foguera Infantil Arrabal Roig de 1935, primera y última que se plantaría en este efímero distrito, está muy bien documentada en el Expediente I-6/1935. Su autoría se debe al propio Presidente de la Comisión, Rafael Ferrándiz, que la tituló “Abusand de la ignoransia”, según el citado expediente, o también “Els esclaus de la mar”, de acuerdo con otras fuentes, aunque probablemente éste hace referencia a una de sus escenas. Medía 1,5 x 1,5 metros de base y 4 metros de altura (curiosamente más alta que el máximo permitido en la actualidad en una foguera infantil), y se plantó frente a los números 123 y 125 de la calle Virgen del Socorro.
La Solicitud de Plantà, que se acompaña de una explicación de la foguera y un boceto en tinta azul, está fechada 9 de mayo de 1935 y presentada en Registro de la Secretaría del Ayuntamiento el 10 de mayo, quedando autorizada el día 1 de junio. Escrita con correctísima caligrafía, la firman Rafael Ferrándiz (Presidente), Manuel Rodrigo (Secretario), Francisco Berdías (Vicesecretario) y Luis Nadal (Tesorero).
La memoria de la foguera, mecanografiada y firmada por el Presidente y el Secretario de la Comisión, explica cada una de las cuatro caras de la foguera infantil. En la primera, “...la playa del Postiguet todavía se presencia el deprimente espectáculo de pescar al «bou» cuadro este ya anticuado e inhumano, puesto que no compensa nunca el esfuerzo de unos hombres que arrastran pesada carga para obtener unos céntimos de compansación”. La segunda escena “...en aquella misma playa llegada la época estival van las mujeres tan sin vestidas que más parecen lugares propios de permanente pornografía, y no por cierto dominando esta clase de gentes, puesto que la playa se ve conmovida de gentes distintas de sana moral y además la infancia”. En la tercera cara de la foguera “...un pobre hombre vendedor de números, que no debe gozar seguramente de buena vista, es burlado por las compradoras que a veces se quedan con varias «parejas» de números y pagan como si sólo una hubiesen tomado”. Y en la cuarta y última, “...hay otro pobre hombre vendedor de agua a domicilio que, con grandes trabajos si fía 3 cántaros por 10 ctmos y parece caro a muchas, mientras que a lo mejor pagan 30 ctmos, por medio litro de vino, cuyo vino tiene tan sólo de tal el color, puesto que es agua pura”.
Boceto de la Foguera Barrio del Arrabal Roig 1936 (AMA)
Por último, llegamos a 1936, último año que plantaría monumento la Foguera Barrio del Arrabal Roig, que así consta su denominación en el Expediente H-26/1936 del Archivo Municipal. Lo hizo con una nueva obra de Esteve Hermanos también con título diverso: “Maldito dinero”, según el boceto, o “Maldita guita”, según otras publicaciones. Se plantó en Categoría B un monumento de 10 metros de base y 9 metros de altura, frente al número 52 de la calle Virgen del Socorro.
La documentación que se conserva de esta foguera es notablemente más escasa. Una escueta Solicitud de Platà firmada por un nuevo Presidente, Eleuterio Alemañ Planelles, fechada el 19 de junio de 1936, sería presentada en Registro de la Secretaría del Ayuntamiento, y aprobada a continuación, en esa misma fecha. Y junto a ella dos bocetos sin firmar, el primero de ellos de la cara frontal, en acuarela, y el segundo de la cara posterior, a tinta. No contiene explicación ni descripción alguna del monumento.
Como ya mencioné, la Foguera desapareció junto con la II República, y hasta la fecha no ha habido conato alguno de recuperarla, prevaleciendo las fiestas tradicionales del alicantino barrio de Raval Roig.