El Colegio Público La Condomina es el más veterano de la zona de la Playa de San Juan, inaugurado hace más de 25 años. Desde el inicio de su labor, se ha podido comprobar que, cada vez que llueve, es el único colegio de Alicante que puede ser accesible en barca. No importa que sean muchos o pocos los litros caídos. Cuando es poco, los alrededores de la zona de acceso se transforman en un lodazal que haría palidecer a Indiana Jones. Cuando llueve mucho… cuando llueve mucho es mejor ni pensarlo.
Hace unos meses, al final del curso pasado, se asfaltó parte del acceso (que llevaba sin hacerse desde la inauguración del centro educativo) y se confeccionó un pasillo pavimentado para que los alumnos, padres, personal docente y resto de ciudadanos pudieran llegar sin tener que embarrarse. Nunca es tarde si la dicha es buena, dice el refrán, pero, vaya, si es tan tarde ya le entran a uno dudas de los sabio que es nuestro refranero.
Como parece que las cosas bien hechas no van con nosotros, el resto de terreno que rodea la zona de entrada del colegio se dejó tal cual estaba. Y eso es una zona de tierra arcillosa más baja que los alrededores, que por escorrentía se llena de agua en cuanto caen cuatro gotas, cercando con un gran charco los alrededores del colegio.
Una vez desaparecida esta zona húmeda intermitente (por evaporación y filtración, no por labor humana), el barrizal hace aparición. Los niños, que no saben que deben de caminar por donde deben hacerlo (que para eso son niños) son los primeros en caer en la viscosa trampa que rodea su “cole”. Pero también han “picado” otras personas más mayores, mascotas y vehículos.
Estas imágenes son del día 29 de Septiembre. Es cierto que las lluvias caídas en la jornada anterior fueron muy intensas (pero cuando lo son menos también se produce el encharcamiento) pero creo que un adaptar un mini “plan anti riadas” en forma de solución eficaz y rápida, tampoco es mucho pedir, especialmente después de tanto tiempo.
Los niños se merecen unos accesos dignos a su colegio, en una ciudad que se dice querer ser “guapa, guapa y guapa”.