01 abril 2009

SANTA POLA: EL VÍA CRUCIS Y LA ERMITA DEL CALVARIO

El Calvario empieza actualmente junto a la calle San Pascual, pero antiguamente, cuentan los mayores que se situaba mucho más abajo, cuando Santa Pola sólo era un pequeño pueblo. Limita con las calles de San Fernando, San Pascual Baylón y San Jorge. Desde abajo se puede observar cómo va ascendiendo de manera clara en zig-zag, hacia la calle de San Jorge y la planicie de la ermita donde se encuentra el Cristo muerto.

Vía Crucis y Ermita del Calvario, antes de su remodelación

Lo más admirable sin duda de la zona del Calvario es el Vía Crucis reformado hace aproximadamente un año. Tanto en la Ermita del Calvario como en el Vía Crucis se puede observar el trabajo realizado en la Edad Media, como son esculturas, bajorrelieves y tallas trabajadas en pórticos, altares, capiteles y frisos de sus muros. Se hizo con la doble intención de transmitir al pueblo de Santa Pola los mensajes doctrinales, como las terribles penas y castigos asociados al pecado, y despertar en los corazones de los creyentes la compasión y la práctica del bien, todo ello expresado magníficamente en el Vía Crucis.

Plaza del Calvario

Detalle de una fachada

Entrada al Parque de La Creu

Tiene su origen en la devoción de los primeros cristianos de Jerusalén. Durante siglos esta devoción tuvo múltiples formas hasta que San Leonardo de Porto Mauricio, en el siglo XVIII, estructuró el Vía Crucis con catorce pasos. Después del Concilio Vaticano II se ha extendido la costumbre de añadir una estación más, la decimoquinta: Jesús resucita de entre los muertos.

Primera Estación (I) del Vía Crucis

El Vía Crucis, como su nombre indica, refleja los pasos que Jesucristo dio en su peregrinaje hacia la cruz. En Santa Pola hay catorce pasos situados en pendiente, que rememoran el sufrimiento de Jesucristo, y por lo tanto representan el amor y respeto por la humanidad.

Última Estación (XIV) del Vía Crucis

Cada paso es idéntico, de una altura de dos metros y una armoniosa arquitectura de dos cuerpos cubiertos con un remate a cuatro aguas, pintado en blanco. El primer cuerpo, de la misma altura que el segundo, es de un volumen neto, contundente, en forma de tronco de pirámide cuadrangular. Justo en el arranque del suelo se resalta el paramento de varios ladrillos en las esquinas, en un color marrón y almagre, color que también está presente en la decoración de la ermita. En el segundo cuerpo, en una hornacina sabiamente protegida por una reja de hierro pintada de negro, con una pequeña repisa hacia el exterior, marcado con el color de los ladrillos en un mosaico de cuatro piezas, pintado y horneado indeleblemente, está el tema de cada paso.

Paseo del Calvario

Ermita del Calvario
Este diseño arquitectónico de los pasos es a la vez sencillo y estudiado, el blanco lleno de luz y el marrón-almagre combinan armoniosamente, y la reja metálica negra añade penitencia a los temas. El diseñador de los pasos y las pinturas de los mosaicos de cerámica, que firma discretamente F. Tolosa en el ángulo inferior derecho de la loseta, se desconoce. Todas las pinturas están enmarcadas en un cuadrado formado por cuatro piezas de cerámica también cuadradas. Un dato curioso en la firma de las losetas es que parece representar un Calvario: la "T" de Tolosa, más alta que el resto de las letras, representaría la Cruz de Cristo, mientras que la "F" inicial y la "A" final serían las cruces de los dos ladrones.

Son los títulos de las catorce estaciones del Vía Crucis del Calvario de Santa Pola, los siguientes:
I. Jesús es condenado a muerte
II. Jesús lleva la cruz a cuestas
III. Primera caída del Señor
IV. Jesús se encuentra con su Madre
V. El cirineo le ayuda a llevar la cruz
VI. La Verónica limpia el rostro de Jesús
VII. Segunda caída de Cristo
VIII. Jesús consuela a las mujeres de Jerusalén
IX. Tercera caída del Señor
X. Jesús es despojado de sus vestiduras
XI. Cristo es clavado en la cruz
XII. Jesús muere en la cruz
XIII. Jesús muerto en los brazos de su Madre
XIV. Jesús es puesto en el sepulcro para resucitar

Mª LORETO BONMATÍ PIEDECAUSA

Fuentes: “EL CALVARIO DE SANTA POLA”, de Miguel Ruiz Martínez
Fotografías: Archivo Ruiz-Mora, Loreto Bonmatí

 
La Asociación Cultural Alicante Vivo se reserva el derecho de moderación, eliminación de comentarios malintencionados, con lenguaje ofensivo o spam. Las opiniones aquí vertidas por terceras personas no representan a la Asociación Cultural Alicante Vivo.