Lo hemos confesado muchas veces, somos fervientes amantes de los murales del artista alicantino Gastón Castelló. Nadie ha conseguido plasmar las escenas tradicionales como él. En sus mosaicos y murales se puede admirar todo un mundo de temas alicantinos: la cultura, la gastronomía, los oficios artesanales tradicionales...
El eje central nace del escudo de la provincia, y está compuesto por dos elementos verticales con una fuerte simbología: una pareja de jóvenes que cruzan sus miradas. Ella, vestida de blanco, con flores en el pelo y un canasto con frutas; él, un joven y fuerte pescador, agarrando unas redes y apoyado en un ancla. Tras ellos, nace la escena bajo palmeras y viviendas típicas. A la izquierda podemos ver trajes y danzas regionales, escenas de fiestas populares como los moros y cristianos, las llamas de la fiesta del fuego y un busto romano que alude a nuestra historia... A la derecha, los trabajadores jugueteros, los operarios de la industria, los pescadores, los agricultores...
Toda una lección de historia sobre la idiosincrasia alicantina, resumida en un hermoso mural.
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