01 agosto 2007

ALICANTE EN EL RECUERDO. LA CRUZ DEL SIGLO

Eran las 7 de la tarde del 16 de marzo de 1934. La gente paseaba tranquilamente por Alicante cuando una tremenda explosión sacudió a la ciudad. La detonación procedía de lo alto del Tossal. Algo faltaba en lo alto. Una carga de dinamita había hecho volar por los aires la Cruz del Siglo.

La idea

Retrocedamos 34 años hacia atrás. Estamos en octubre de 1900. El Semanario Católico proponía en su número 86 del 13 de ese mes que con motivo de la traída de la Santa Faz a Alicante y siguiendo el ejemplo de otras ciudades europeas que celebrarán el Año Santo levantando cruces, se coloque en lo alto de la Sierra de San Julián una cruz de hierro.

Rápidamente el publicista D. Alberto J. de Thous Moncho toma la iniciativa: "Alicante debe dar muestra palmaria de su fe y de su entusiasmo religioso, cada vez más pujalte y creciente; Alicante, como todo pueblo culto, debe solemnizar la despedida del siglo que nos deja, para sepultarse en los abismos profundos de la eternidad, y preparar digno recibimiento al nuevo siglo que alborea (...) Una grande y hermosa Cruz de hierro en el vértice del monte [de San Julián], perpetuaría grata y dulcísima memoria".La Junta

La Junta Organizadora de la construcción de la ahora denominada "Cruz monumental" se crea de inmediato en el domicilio de D. Manuel Senante Martínez (en la foto). La junta queda compuesta de la siguiente forma:

Presidente de Honor: Abad D. José Pons y Pomares
Presidente: D. Juan M. Seguí (director del Semanario Católico e iniciador de la idea)
Vicepresidente: D. Francisco Antón y Tarí (Cura de Santa María)
Tesorero: D. Antonio Seva (banquero)
Contador: D. Antonio Visconti (comerciante)
Secretario: D. Antonio Cremades Bernal
Vocales: D. Mariano Olmos Alcaraz (Canónigo de San Nicolás), D. Manuel Galbis (Sacerdote de SN), D. Tomás de la Torre (Capitán de Infantería), D. Enrique María Ripoll (periodista y letrado) y D. Francisco Albero (médico)

Se abría a continuación una suscripción popular que calaría sobretodo entre la burguesía alicantina. Los donativos se recogían en los siguientes comercios:

- Comercio de D. Antonio Visconti (Plaza de la Constitución, hoy Portal de Elche)
- Comercio de D. José Giner y D. Francisco Cano (Calle Mayor 6)
- Farmacia de D. Salvador Pascual (Plaza de San Francisco, hoy de Calvo Sotelo)
- Archivos Parroquiales de Santa María y San Nicolás
- Redacción del Semanario Católico

Los donativos y la polémica

El Graduador en su número del 8 de noviembre comentaba la falta de interés del clero alicantino en la construcción del monumento. Rápidamente el Semanario Católico salía en defensa del clero afirmando que estaban volcados en la obra. Además afirmaba que no habían devuelto el dinero a nadie y que la junta seguía adelante.

Como hemos dicho más arriba, a la vista de los apellidos y tratamiento de los donantes, la idea de la Cruz del Siglo caló sobretodo entre la burguesía y comerciantes alicantinos. Tenemos entre otros a:

- D. Juan M. Seguí (15 pesetas)
- D. Antonio Seva (10)
- D. José García Díe (1)
- D. José Gadea Pró (5)
- D. José Soler Sánchez (12)
- D. Zoilo Martínez (tte alcalde) (5)
- Marqués del Bosch (25)
- D. Juan Alberola Romero (3)
- D. Román Bono Luque (2)
- D. Juan Guardiola (2)
- Comercio de Giner y Cano y D. Rafael Gil Samper (11,70)
- D. Rafael Terol e hijas (3)
- D. Evaristo Manero Mollá (1)
- Baronesa de Petrés (10)
- Dª Carolina Leach (2)
- D. Lorenzo Antoine (2)
- D. Ricardo Guillén Pedemonti (2)
- Dª Camila Batllé de Santafé (10)
- Alcalde de Alicante, Barón de Petrés (15)
- Gobernadores Civil y Militar (5 cada uno)
- Dª Luisa Bonanza Roca de Togores (5)
- D. Juan Poveda (diputado) (15)
- Dª Flora España (2)
- D. Blas de Loma y Corradi (1)
- D. Juan Such Serra (1)
- D. Carlos de Aguilera (2)
- Abad Pons (10)
- D. Miguel Elizaicín y señora (1)
- D. Emilio Senante (5)
- D. Manuel Senante Martínez (5)

Donativos destacados

Sin duda alguna los donativos más destacados fueron los de D. Clemente Miralles de Imperial con 100 pesetas y el Excmo Ayuntamiento de Alicante, que recibe el 14 de diciembre una instancia para que colabore con la suscripción popular y así lo hace aportando 500 pesetas.

Miralles de Imperial dirige una carta a D. Francisco Antón, cura de Santa María el 6 de noviembre de 1900 por la que conminaba a su primo D. Gonzalo Miralles a entregar de su parte los 20 duros del donativo. Además se comprometía a dar a conocer el proyecto entre los alicantinos residentes en Barcelona.

Diez vecinos del Moralet, a través de D. José Giner, realizan un donativo de 2,50 pesetas una vez inaugurada la Cruz. Sus nombres se publican sin el "DON" delante.

Se menciona el próximo donativo de las cigarreras de la Fábrica de Tabacos, pero por falta de algunos números del semanario no podemos confirmar la aportación ni el importe de la misma. Por el mismo motivo no podemos consignar el "espléndido donativo" de Dª Mariana Pascual de Bonanza.

El proyecto y sus inconvenientes

Hasta este momento se atribuía al Abad Pons el proyecto de Cruz Monumental. Tal y como hemso descubierto desde Alicante Vivo en esta investigación, la Junta recibe en noviembre de 1900 un croquis realizado por el destacado arquitecto D. Enrique Sánchez Sedeño, difusor en Alicante del Modernismo, el cual se comprometía a realizar el proyecto gratuitamente. De la labra de la cruz se encargaría el maestro cantero D. Ramón Ibáñez el cual debido a "imprevistos incidentes ocurridos" no terminaría a tiempo la obra.

El diseño elegido fue el formado por una columna de piedra de 10 metros de alto de estilo dórico con una faja circundante con el motivo de su construcción y la fecha del 1 de enero de 1901. En la parte alta una bola del mundo coronada por una cruz de hierro.

Los inconvenientes surgen en noviembre de 1900. El acarreo de los materiales a lo alto del Cerro de San Julián costaban 150 pesetas el metro cúbico, cantidad que duplicaba el coste del proyecto por lo que la Junta pasaba a deliberar un nuevo emplazamiento de la Cruz del Siglo. La decisión debía tomarse rápido puesto que todo estaba preparado ya para empezar la obra. Al mes siguiente se informaba que el cerro elegido era el Tossal (o Cerro de San Fernando, pero nunca Monte Tossal). "Allí Dios mediante, se levantará airoso el monumento insignia de la fé que esta noble tierra tiene al Redentor, allí se implantará la Cruz que ha de decir á las generaciones venideras cómo celebró este pueblo la entrada del siglo XX"El 10 de diciembre empezaban las obras de cimentación. La obra se pensaba finalizar en breve puesto que la labra estaba casi finalizada. La Junta vuelve a hacer una llamada al pueblo de Alicante para que haga donativos puesto que la obra ha originado déficit. Se justificaban diciendo: "las obras de Dios van acompañadas del sacrificio, y (...) justo es quequien sigue sus doctrinas experimente parecidas amarguras"

La inauguración 

Como hemos dicho, los retrasos de última hora impidieron su inauguración coincidiendo con el fin de siglo. Se propnía el 13 de enero para inaugurar la Cruz del Siglo, pero la fecha se trasladaba definitivamente al domingo siguiente. El 20 de enero de 1901 unas 2000 personas se arremolinaba en los alrededores de la nueva cruz. A las cuatro de la tarde salía la comitiva desde San Nicolás llegando entre un fuerte y frío viento a los pies del Tossal donde se formaba la procesión que diez minutos más tarde llegaba a lo alto del cerro de San Fernando.

El alcalde accidental don D. Zoilo Martínez e infinidad de religiosos están presentes en el acto. No sólo simpatizantes sino algunos detractores también se dejan ver. La única ausencia relevante es la del Abad Pons, ya muy enfermo y que fallecería días después.

La ceremonia es presidida por D. Antonio de Paula Ibáñez, el cual bendice el monumento, se canta un Te Deum y posteriormente D. Francisco Antón Tarí improvisa unas palabras a petición de los presentes. "Cristo vive, Cristo reina, Cristo impera" fueron las palabras que cerraron el acto. Alicante celebró la inauguración con un volteo de campanas.

Destrucción y reconstrucción de la Cruz del Siglo

Ya hemos llegado a 1934. La Cruz que ha sobrevivido a los desmanes del 11 de mayo de 1931 vuela por los aires. Mi abuela recuerda que subía de pequeña a merendar a los pies de la cruz y que un día llegó y vió que sólo quedaba una montaña de escombros. Los diarios conservadores de la época dieron cuenta de la sacrílega destrucción.
Por lo visto los restos fueron guardados por algún católico y parte de esos restos se usaron para reconstruir la cruz después de la Guerra Civil. La orden de reconstrucción de la Cruz del Siglo sería dada nada más terminar la Guerra Civil. El primer ayuntamiento franquista presidido por D. Ambrosio Luciáñez Riesco acordaba, en el pleno del 21 de abril de 1939, reconstruir la cruz de fin de siglo levantada en el Castillo de San Fernando y las de Fusta y Piedra en la Carretera de la Santa Faz. Además se acordaba levantar una Cruz de los Caídos pensada en principio para la Plaza del Teniente Luciáñez (hoy Paseíto de Ramiro).
La Cruz del Siglo a día de hoy
En la actualidad la cruz del arquitecto Sánchez Sedeño se alza en el interior del Colegio La Aneja. El monumento, que no aparece en la lista de la web del ayuntamiento, puede verse desde la calle Santa Felicitas, cruce con Pintor Gisbert y Cardenal Belluga dirigiendo nuestra mirada a lo alto del Tossal.

Y esta es la pequeña historia de este bonito monumento olvidado de Alicante. Os contamos esta historia con mucho más detalle en nuestro libro "Relatos de una ciudad dormida". Editado por Editorial Club Universitario (ECU). Consíguelo AQUÍ.

Fuentes: Centro Católico de Alicante. De Gonzalo Vidal Tur (1961) Artículo de Fernando Gil (años 80), El Semanario Católico (nº 86 a 111), Crónica de Alicante Tomo II de D. Enrique Cutillas Bernal y recuerdos familiares.

ALFREDO CAMPELLO QUEREDA


ACTUALIZADO EL 18 DE JULIO DE 2008

 
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