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Publicado por Juan José
El yacimiento y su necrópolis están situados en un saliente de la Sierra del Molar, a 40 metros sobre el nivel del mar. La geografía del lugar (en la actualidad) debe ser bastante diferente a lo que fue en la antigüedad, y es mas que probable que el Molar fuera una isla rodeada de marismas hasta el s. XVIII, y que existiera una albufera navegable.El poblado fue abandonado de forma pacífica en la época del ibérico pleno, lo que explicaría lo escaso de los materiales encontrados y que su población se trasladara al cercano poblado de la Escuera.
Es, con seguridad, el yacimiento mejor estudiado de la Contestania gracias a la meticulosa excavación dirigida por Lorenzo Abad y Feliciana Selles.
Las excavaciones del poblado comenzaron en 1980. Los resultados de las últimas excavaciones han sido recientemente publicados por la editorial de la Real Academia de la Historia de Madrid (Abad-Selles 2001), que incluye una propuesta de reconstrucción informatizada del yacimiento. Se han obtenido diferentes materiales como cerámicas áticas de barniz negro y figuras negras, ánforas, copas de cerámica gris, cerámica ibérica con decoraci
ón de círculos, fíbulas, herramientas de hierro, figuras de barro, fragmentos de cáscara de huevo de avestruz, pesas de telas y piedras de afilar, entre otros.Su abandono se produciría a principios del s. IV a.C, por lo que aporta importante información sobre el periodo de formación de la Contestania.
Entre las actividades económicas del poblado estarían la producción agrícola, la explotación de pastos, la caza, la recolección de huevos, la pesca, la explotación de las salinas, la preparación de salmueras y, posiblemente, la explotación minera. Se trataría de un modelo económico autosuficiente, enriquecido con transacciones comerciales como parece demostrar la presencia de ánforas locales e importadas así como algunos productos exóticos. Recientemente se han identificado materiales procedentes del Oral en las excavaciones del Grau Vell (Arse-Sagunto), que confirma el comercio entre ambos asentamientos.
La necropolis de El Molar, por su parte, fue excavada en 1929 por Lafuente Vidal y Juan José Senent, aunque posteriormente se han realizado sondeos con nuevos hallazgos. Se trata de una necrópolis ibérica asociada al poblado de El Oral, con el que presenta gran concordancia cronológica. Se han excavado sepulturas con diferente tipología (hoyos con cenizas, hoyos con urnas de diferente tipología y cajas funerarias en piedra). Se han rescatado urnas de orejeras, bitroncocónicas, material de ajuar, fusaiolas, escarabeos, cuentas de collar y pequeñas joyas de oro.
Es de destacar el hallazgo de una escultura ibérica de toro en 1908, actualmente en el MARQ.
Entre las actividades económicas del poblado estarían la producción agrícola, la explotación de pastos, la caza, la recolección de huevos, la pesca, la explotación de las salinas, la preparación de salmueras y, posiblemente, la explotación minera. Se trataría de un modelo económico autosuficiente, enriquecido con transacciones comerciales como parece demostrar la presencia de ánforas locales e importadas así como algunos productos exóticos. Recientemente se han identificado materiales procedentes del Oral en las excavaciones del Grau Vell (Arse-Sagunto), que confirma el comercio entre ambos asentamientos.
La necropolis de El Molar, por su parte, fue excavada en 1929 por Lafuente Vidal y Juan José Senent, aunque posteriormente se han realizado sondeos con nuevos hallazgos. Se trata de una necrópolis ibérica asociada al poblado de El Oral, con el que presenta gran concordancia cronológica. Se han excavado sepulturas con diferente tipología (hoyos con cenizas, hoyos con urnas de diferente tipología y cajas funerarias en piedra). Se han rescatado urnas de orejeras, bitroncocónicas, material de ajuar, fusaiolas, escarabeos, cuentas de collar y pequeñas joyas de oro.
Es de destacar el hallazgo de una escultura ibérica de toro en 1908, actualmente en el MARQ.
En el año 2004, una pala excavadora de la cantera Starmis, cuyos l
ímites lindan con el yacimiento de El Oral, arrasaron un tercio del yacimiento, concretamente toda la zona occidental que quedaba por excavar.(FOTO 3) Ante la pasividad del Ayuntamiento de San Fulgencio, propietario del yacimiento pero preocupado sobre todo por los millonarios proyectos de urbanización en marcha en el entorno del sitio arqueológico, muchas organizaciones llamaron la atención sobre esta incalificable agresión al patrimonio, para que no quedara impune.
Sabemos en Alicante en el Recuerdo que cada uno de nosotros aguanta su propia cruz y que todos estamos demasiado ocupados, pero es importante que reconozcamos la importancia que ha tenido el poblado en los estudios de la cultura ibérica y lo que puede significar la pérdida del yacimiento.
ímites lindan con el yacimiento de El Oral, arrasaron un tercio del yacimiento, concretamente toda la zona occidental que quedaba por excavar.(FOTO 3) Ante la pasividad del Ayuntamiento de San Fulgencio, propietario del yacimiento pero preocupado sobre todo por los millonarios proyectos de urbanización en marcha en el entorno del sitio arqueológico, muchas organizaciones llamaron la atención sobre esta incalificable agresión al patrimonio, para que no quedara impune.Sabemos en Alicante en el Recuerdo que cada uno de nosotros aguanta su propia cruz y que todos estamos demasiado ocupados, pero es importante que reconozcamos la importancia que ha tenido el poblado en los estudios de la cultura ibérica y lo que puede significar la pérdida del yacimiento.
INFO: Contestania
