22 mayo 2007

EL CAMPELLO EN EL RECUERDO (II)

Los restos más antiguos de El Campello se hallan en la Illeta dels Banyets, un espacio privilegiado para el conocimiento de su historia. Allí descubrió Francisco Figueras Pacheco los primeros asentamientos, datados de la prehistoria, del Calcolitico y de la Edad de Bronce. De especial relevancia son los restos del poblado Ibero, único por sus características, y considerado uno de los más importantes de Europa. En el poblado se han encontrado unas pequeñas termas y muy especialmente las piscifactorías, viveros cortados en la piedra, que han dado nombre al enclave a través de la tradición popular, conociéndose como Els Banyets de la Reina. Las piscinas, que según esta tradición, eran para uso de una bella reina mora, son, en realidad, construcciones de gran importancia en la época, utilizadas para poder conserva la pesca y que dieron lugar a una importante industria de salazones.

El cercano barranco de Aigües tuvo gran importancia histórica ya que fue línea fronteriza entre los reinos de Castilla y Aragón. El monarca Jaime II, en 1.296, anexionó estos territorios definitivamente a la corona aragonesa y, con ello, al reino de Valencia.
Las continuas incursiones de piratas berberiscos a sus costas motivó que, en el siglo XVI, se construyese un sistema de vigilancia compuesto por torres circulares para facilitar la defensa de una asustada y dispersa población y evitar que se convirtiesen en víctimas del pillaje y del saqueo. La Torre del Barranc d'Aigües y la Torre de la Illeta son ejemplos que han llegado hasta nuestros días. Ésta última, concluida en 1.557 y restaurada a finales del s.XX, constituye todo un símbolo para los campelleros.
Pero no encontramos los orígenes reales del municipio hasta el siglo XVIII, cuando el dueño de las tierras, D. Nicolás Pérez de Sarrió, trajo las primeras familias de colonos para que cultivaran la tierra. A esta época pertenece el “Convento de los Mercedarios” primera parroquia de la entonces pedanía. A finales de este siglo se construye el primer astillero en la desembocadura del río Seco (Montnegre), germen de una emergente industria pesquera que, de alguna manera aún pervive, y que contó con una de las flotas más importantes del mediterráneo.
Durante el siglo XIX, la consolidación de la propiedad de los enfiteutas de Perez de Sarrió, la construcción del “assut” de El Campello, el desarrollo de la industria del “filet d´espart” , la instalación de “fusteries de ribera” y las “sendas” del cáñamo son circunstancias que desembocan en la petición de la segregación de las partidas de Fabraquer, El Campello, Aigües Baixes y Baranyes, el 23 de abril de 1898. Dicha segregación, impuesta por el Ayuntamiento de Alicante, se conseguirá el 18 de abril de 1901, siendo el primer alcalde José Ávila Blanes. Sin embargo, el primer alcalde electo será Marco Antonio Vaello Galiana en 1903, quién dominó la política de la población hasta 1923.
A partir de los años 50, la agricultura de exportación (a través de la empresa Bonny S.A.), la construcción y el turismo, son los nuevos pilares económicos que, con la llegada de inmigrantes, provocaron un crecimiento urbano espectacular.
El Ensanche de 1953-59 (Eduardo Dato-Calvo Sotelo-San Juan Bosco-Major) y la urbanización masiva de la costa, se llevaron a cabo durante los años 60 y 70.
El caracter excepcional de su costa (Llop Marí, Coveta Fumá, etc...) provocó la llegada de turistas extranjeros que aumentaron la demanda de viviendas chalet y edificios de altura. La crisis de los años 70 paralizó la construcción y evidenció la necesidad de una planificación municipal: el Plan General de Ordenación Urbana de 1978.
El Campello es un lugar privilegiado. Ubicado en el corazón de la Costa Blanca, a un paso de sus principales urbes, tan sólo a 10 kilómetros de Alicante y a 30 de Benidorm, es un pueblo con hondo sabor marinero que ha sabido transformarse, sin perder sus raíces, en un municipio turístico de primer orden.

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Puedes localizar El Campello en nuestro Mapa de Panoramio.

 
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