Estudió Gramática en Zaragoza, aunque un tío le envió en 1725 a la isla de Malta, adquiriendo la condición de Caballero de Malta a los catorce años, lo que implicaba el celibato de por vida.
En 1729 regresó a España para ingresar en la Real Compañía de Guardias Marinas de la Escuela Naval Militar de Cádiz. Debido a que tenía los estudios pertinentes se embarcó enseguida. Durante su formación realizó varias campañas en el Mediterráneo, participando en la expedición contra Orán y en la campaña de Nápoles. Con 21 años finalizó sus estudios de guardiamarina.
En 1734 el monarca Felipe V recibió una invitación de su primo el rey Luis XV de Francia para que España participase en la expedición que la Real Academia de Ciencias de París organizaba para viajar a Quito (virreinato del Perú), para medir la longitud, correspondiente a un grado, de un arco de meridiano terrestre en el Ecuador.
La expedición científica, con el objetivo de aclarar diversas teorías sobre la forma y el tamaño de la Tierra, a las órdenes de Charles de la Condamine, pretendía comparar la medición de Quito con otra medición, también de un grado, obtenida en el Polo Norte por el físico y matemático parisino Pierre Louis Maupertius.
Por decisión de Felipe V, debían ir dos oficiales que fueran capaces de realizar los cálculos por si mismos, al margen de los cálculos desarrollados por los franceses. Para este trabajo se eligió a dos jóvenes guardias marinas: Jorge Juan y Santacilia y Antonio de Ulloa y de la Torre-Guiral. Como los jóvenes carecían de la graduación necesaria, se les ascendió directamente al grado de tenientes de navío.
Se asignó a cada oficial un trabajo, Jorge Juan se encargaría fundamentalmente del matemático y Antonio de Ulloa del naturalista, además de una tarea con fines políticos.
Comparando las mediciones de las dos expediciones científicas (Condamine y Maupertius) , se pudo determinar que la Tierra tiene forma de un elipsoide de revolución achatado por los polos, pues las longitudes de los arcos de un grado de meridiano van creciendo desde el Ecuador hacia aquéllos. Además, se precisó el diámetro de los ejes de la Tierra y se calculó su grado de achatamiento.
Después de nueve años de permanencia en América, Jorge Juan llegó a París para cambiar impresiones con las observaciones del ingeniero francés Louis Godin, siendo nombrado Miembro de la Real Academia de Ciencias de París. De regreso a España, el rey Fernando VI nombró a Jorge Juan capitán de navío.
El Marqués de la Ensenada le encargó en 1750 dirigir la construcción naval española. Jorge Juan se encargó de relanzar los astilleros de Cartagena, Cádiz, El Ferrol y La Habana, donde imponiendo un criterio industrial de división del trabajo, se construyeron navíos como el Apostolado, el Aquilón y el Oriente.
En 1752 Jorge Juan es designado como director de la Academia de Guardias Marinas de Cádiz, donde implantó las enseñanzas más avanzadas del momento.
En 1757 fundó en Cádiz el Observatorio Astronómico, dotándolo de los aparatos más modernos. En 1760 fue nombrado Jefe de Escuadra de la Armada Real.
En 1767 es nombrado embajador extraordinario a la Corte del emperador de Marruecos.
En 1770 el Rey le confió la dirección del Real Seminario de Nobles, y fue dirigiendo ese cargo cuando murió el 21 de junio de 1773.
JUAN JOSÉ AMORES
ACTUALIZACIÓN DE DANIEL
Hay una faceta de la vida de Jorge Juan que a mi, personalmente, siempre me llamó mucho la atención y que , gracias a la Fundación Jorge Juan y en especial a su patrono secretario Don Jorge Juan Guillén Salvetti, llegó a mis manos hace algunos años en forma de pequeña biografía del sabio español:
"En marzo de 1749 Jorge Juan fue enviado a Londres con el nombre de Mr. Josues con varias misiones secretas, por encargo del Marqués de la ensenada, que para sus planes de reforma de la Armada necesitaba información acerca de todo lo relacionado con la contrucción naval , y traer a España expertos constructores de barcos, velas, cordajes, etc. Mientras tanto, recogió información acerca de la fabricación de los finos paños ingleses, el lacre, matrices de imprenta, máquinas para limpiar puertos, armamentos, compra de instrumentos de cirugía para el Colegio de Cádiz, blanqueo de la cera, bomba de fuego (vapor) para sacar agua , y todo lo que en los planes de Ensenada suponía reorganizar la economía y poner a España al nivel de los mejores paises de Europa. Las cartas de Jorge Juan con Ensenada se escribían en clave numérica. La actividad secreta del espionaje industrial no impidió que Jorge Juan fuese adminitdo , recién llegdo el 6 de abril, como miembro de la Royal Society de Londres, al igual que lo fue Ulloa. Al cabo de 18 meses tuvo que escaar ganando la costa de francesa disfrazado de marinero, no sin antes haber conseguido llevarse a España 50 técnicos navales. Esta actividad nos muestra una faceta algo ajena a su personalidad de sabio erudito, no obstante, prueba su increible capacidad de adaptación al trabajo e interes por ser útil y servir al Rey y a España, como reconocerán todos los que escribieron sobre él".
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