Nos habíamos quedado en el hallazgo de los tres viacrucis del monte Calvario de Sant Joan d'Alacant. Ahora nos queda la duda de saber cuál fue su historia y por qué acabaron desapareciendo una y otra vez.
Tenemos que remontarnos a finales del siglo XVIII. Por esa época se construyen dos viacrucis en dos montes de Sant Joan y Mutxamel que pasarían a denominarse Monte Calvario. Sin que nos quede claro qué ermita se alzó antes, sí sabemos que en la Guerra de la Independencia la de Sant Joan ya estaba en pie puesto que fue asaltada por las tropas francesas que habían sido derrotadas en la Batalla del Calvario. Según cuenta Don Federico Sala "se llevaron un cuadro de gran valor".
La ermita de la cumbre del monte no es una ermita propiamente dicha, sino la estación número 14 del viacrucis que recibe el nombre del Sepulcro. Hasta allí cada jueves Santo los santjoaners subían en procesión parando en cada estación con una cruz que era plantada en la rueda de molino que hay frente a la puerta.
Algo debió pasar con el viacrucis del XVIII puesto que el 12 de marzo de 1933 el dueño del monte, Don Franciso Écija de Paco contando con todos los permisos oportunos, levanta el viacrucis en la Finca Monte Calvario. Era un nuevo viacrucis construido para durar muchos años..... pero sólo duró tres.
25 de julio de 1936. Hace 7 días que Franco y sus secuaces han dado un golpe de estado infructuoso. El gobierno y la autoridad municipal pierden todo su poder. El 19 de julio es asaltada la Iglesia de San Vicente del Raspeig y destruidas todas las imágenes. Ese 25 de julio, al caer la noche, y después de haber sido asaltada la Iglesia de San Juan Bautista y la Ermita de San Roque de Benimagrell, le toca el turno a la ermita del Calvario. Al no poder tumbar las puertas las rocían con líquido inflamable y les prenden fuego. La Familia Pastor, dueña del monte, decide trasladar la imagen del Cristo a su Panteón familiar donde quedó resguardado y el frontal del altar a una finca cercana lo cual no impidió que fuera quemado. El viacrucis queda destruido.
Año 1940, el sacerdote Francisco Sala solicita donativos para reconstruir el viacrucis sin consultar con su dueño, el también sacerdote Antonio Pastor Fluixà. Al enterarse por terceros impide su reconstrucción.
En 1966 se realiza un estudio topográfico del monte en el que se cuenta que tras la guerra se colocaron puertas nuevas a la ermita y que habitó una familia gitana en su interior. Poco a poco la ermita se va degradando. A principios del siglo XXI los vándalos dañan severamente la base de la fa
chada provocando que toda la edificación se resienta apareciendo grandes grietas. Varios incendios en el interior ennegrecen la cúpula y los altares.
chada provocando que toda la edificación se resienta apareciendo grandes grietas. Varios incendios en el interior ennegrecen la cúpula y los altares.
En 2006, tras publicar un artículo en el Información, consigo que el Ayuntamiento, su nuevo propietario, consolide las ruinas hasta que este mes pasado se comienza a restaurar. Paco Ramón y yo presentamos un escrito al Ayuntamiento en el que explicábamos todo esto y exponíamos una propuesta de reconstrucción del viacrucis. ¿Cómo acabará la cosa?
Tras todo esto nos surgen algunas dudas aún sin respuesta. ¿Qué le pasó al viacrucis del siglo XVIII? ¿Se levantó otro igual tras la guerra o se sustituyó por el de peanas de ladrillo de la Cerámica Ramón Borja? En una visita al Panteón de la Familia Pastor Fluixà hallamos una imagen del Nazareno igual a la que nos describió una anciana del pueblo cuya madre limpiaba la ermita allá por los años '20. ¿Qué pinta un Nazareno en un Panteón? ¿Será la misma imagen que hubo en la ermita? ¿Qué fue de la imagen del Cristo?
ALFREDO CAMPELLO